n Manuel Ruano deja la dirección de operaciones y la presidencia de Aludium, cargos que venía ocupando en los últimos tres años, desde que se lanzó en 2015 la compañía, tras la adquisición por parte del fondo de inversión norteamericano Atlas Holdings de las fábricas de Alicante, Amorebieta (País Vasco) y Castelsarrasin (Francia), que pertenecían a la multinacional del aluminio estadounidense Alcoa. Un cambio que visto con perspectiva supuso una etapa de consolidación, pero que en aquel entonces «pocos estaban convencidos de ese futuro», a excepción de un grupo de personas liderado por el propio Ruano. Ayer, el todavía presidente de la compañía hablaba del «choque cultural» que representó para muchos, incluidos los propios trabajadores, el hecho de que fuera un fondo de inversión el que controlase la empresa.

Sin embargo, transcurrido el tiempo, aseguró que hoy «nadie se cuestiona en la ciudad si la empresa continúa», aludiendo al nuevo periodo de fortalecimiento iniciado por la compañía. Y que fue posible, gracias a que «se presentó un plan realista» y a que Atlas «se comprometió con el mercado y la estrategia». No obstante, admite que llegar hasta aquí «no ha sido fácil porque el mercado del aluminio es complejo y había un exceso de capacidad de producción. Pero hemos conseguido ganar credibilidad», sentenció. «Ahora, lo que nos planteamos es reforzar el crecimiento», añadió.

Ruano, valenciano de nacimiento, llegó a Alicante en 2003, como director general de Productos Especializados cuando la factoría pertenecía a Alcoa (con quien se inició la privatización en 1998, al comprar las acciones de la estatal Inespal). En 2008, sobrevino la crisis. «Se vivieron etapas duras. Pese a ser una empresa eficiente, perdíamos mercado». Incidió en que entre 2008 y 2012, «fueron años duros. No había conciencia en la sociedad de que se podía salvar (la planta)». Pero tanto la firma como los trabajadores se comprometieron con el proyecto. «Hubo regulaciones temporales de empleo, reducción de salarios...». Para Ruano, fue una experiencia importante de «cómo estructurar - no habla de reestructuración- una compañía durante la crisis». En 2013, Alcoa decide vender y no es hasta 2015 cuando Atlas adquiere las tres plantas que conforman Aludium.