Una brecha aún más profunda de la que en algunos casos ya existía dividió ayer a los acusados en el proceso por las dietas de Modesto Crespo que están compartiendo el banquillo de los acusados. La solicitud de absolución planteada por el fiscal Felipe Briones para 13 de los 21 encausados hizo que sus caras fueran el día y la noche en una sesión que no dejó indiferente a nadie. Así, la alegría que no se preocuparon en ocultar quienes ven cercano el fin de su calvario judicial, como es el caso del empresario Jesús Navarro o el psicólogo Óscar Estrada (en la imagen de la derecha, fotografiados al término de la sesión) contrastaba con el gesto serio con el que se marchó Martín Sevilla (izda) o el de Roberto López Abad y Antonio Gil-Terrón (en la foto del centro junto a sus abogados).