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Alicante se mantiene como la provincia española con más actividad inmobiliaria

Durante el primer trimestre del año se vendieron 10.232 viviendas en la zona, más de 113 cada día, según los Registradores

Alicante, la provincia con más actividad inmobiliaria

La recuperación del mercado inmobiliario alicantino no parece tocar techo y encara ya su sexto año de crecimiento consecutivo sin visos de que nada pueda interponerse en su consolidación definitiva. Según los datos divulgados ayer por el Colegio de Registradores, durante el primer trimestre de este ejercicio se vendieron en la provincia 10.232 viviendas, un 17,84% más que en el mismo periodo del año pasado, lo que significa que cada día cambiaron de manos más de 113 casas en la zona.

Un ritmo de ventas más que notable que ya supera ligeramente al que se producía en 2008 pero que aún se queda bastante por debajo de las casi 170 viviendas diarias que se llegaron a vender en el primer trimestre de 2017, de acuerdo con la serie histórica que guardan los Registradores.

De esta forma, Alicante volvió a ser durante el periodo la tercera provincia en número absoluto de operaciones -tan sólo por detrás de Madrid, donde se formalizaron 18.855 compraventas, y de Barcelona, con 14.328-, aunque si lo que se mide es la actividad inmobiliaria en relación a su número de habitantes, Alicante fue líder absoluto.

Así, en los tres primeros meses del año se gestionaron en la provincia 5,54 ventas de viviendas por cada mil residentes, una proporción que nadie más supera. La segunda en el ránking fue Málaga, con 4,81; seguida por Castellón (3,78), Almería (3,75) y Girona (3,74).

Tirón internacional

Todas las provincias que encabezan esta lista de actividad tienen en común que son demarcaciones con un elevado componente turístico y de segundas residencias, lo que deja claro el peso que tienen los extranjeros en la recuperación del sector. Así, Alicante también es la provincia con mayor porcentaje de foráneos entre el total de compradores de viviendas, con un 41,05%, por encima de Tenerife (40,78%), Baleares (31,72%), Málaga (30,57%) o Girona (26,94%).

Igualmente, los datos también corroboran que, de momento, es la vivienda de segunda mano la que protagoniza esta escalada del sector inmobiliario. Las transacciones de inmuebles usados supusieron el 87% del total, un porcentaje que el secretario general de la Asociación Provincial de Promotores, Jesualdo Ros, confía en que se vaya reduciendo a medida que aumente el número de promociones que se finalizan, una vez que los empresarios han decidido volver a construir tras el parón que siguió al estallido de la burbuja inmobiliaria.

«Es normal que el porcentaje de pisos nuevos sea bajo porque la oferta de nueva construcción aún es pequeña», apunta Ros, que también denuncia que el ritmo construcción sería mayor sin la lentitud que están mostrando los departamentos de urbanismo de la mayoría de municipios de la provincia a la hora de tramitar las licencias de obra. En cualquier caso, parece que la segunda mano seguirá siendo mayoritaria durante bastante tiempo si se tiene en cuenta que, frente a las 10.232 viviendas vendidas en el primer trimestre, apenas se empezaron a construir 2.093, según los datos del Colegio de Aparejadores.

En cuanto a la financiación necesaria para la compra, la hipoteca media en la Comunidad Valenciana -los Registradores no facilitan datos provinciales sobre esta materia- se situó en los 87.737 euros, muy por debajo de la nacional, de 121.123 euros. Como es lógico, esto significa que los valencianos tienen que hacer un esfuerzo mucho menor para acceder a la vivienda. En concreto, de media deben destinar el 24,89% de su salario a pagar la cuota mensual frente al 29% del conjunto del país o el 42,38% que deben pagar en Islas Baleares.

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