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Cámara de Comercio

Los empresarios presionan a Riera para que logre un consenso en el comité de la Cámara

El único aspirante a la presidencia deberá seguir negociando esta semana con Fempa, Facpyme y Carlos Baño, que exigen una representación acorde a su peso y no quieren a Cristóbal Navarro en este órgano

Riera, en el centro, en uno de los últimos plenos de la Cámara de Comercio de Alicante. rafa arjones

Jornada intensa de reuniones la que ayer vivió el hasta ahora único aspirante a la presidencia de la Cámara de Comercio de Alicante, Juan Riera, que aún debe garantizarse su presencia en el pleno de la institución, antes de poder optar a este cargo. La más importante fue la que mantuvo con los representantes de la Federación del Metal (Fempa), la del Comercio (Facpyme), el empresario Carlos Baño y un histórico de la institución como Juan Zaragoza, que juntos controlan cerca de la mitad de las candidaturas que se han presentado para ocupar los 40 sillones del pleno que se escogen por elección. Y lo que le dejaron claro al empresario dianense es que quieren que ese peso se note también en la composición del próximo comité ejecutivo, que quieren consensuado y con el mayor número de apoyos posible, lo que significa, por ejemplo, dejar fuera al presidente de Cepyme, Cristóbal Navarro, que no cuenta con la simpatía de ninguno de los anteriores.

El encuentro se prolongó durante más de tres horas y media y lo que se planteó, básicamente, fue que este bloque respaldaría a Riera en sus aspiraciones a la presidencia a cambio de un pacto sobre el resto del comité. La dificultad para llevarlo a la práctica estriba en el gran número de candidaturas que se han presentado en casi todos los grupos de electores, lo que hace que casi nadie tenga garantizado su sillón en el pleno.

Entre ellos, el propio Riera, que necesita ser designado como miembro electo para optar a la presidencia pero ha encontrado competencia en los tres grupos en los que concurre, aunque probablemente acabe entrando por el de Promoción, si nada se tuerce. Ahora las negociaciones se centran en ver quién se retira en cada grupo para garantizar que todos los implicados en el posible acuerdo obtengan el máximo número de representantes, a ser posible, sin necesidad de que intervengan las urnas. Es decir, consiguiendo que el número de candidatos sea el mismo que las vacantes en cada categoría. Eso implica convencer a los sacrificados, de ahí que ayer el encuentro se cerrara sin un acuerdo concreto y que los negociadores se emplazaran para manñana miércoles para continuar con las conversaciones.

El papel de Sala y Regalado

Las fuentes consultadas aseguran que, de momento, todavía no se ha hablado de nombres concretos para cada cargo en el comité aunque Juan Riera, por ejemplo, querría incluir en este órgano a los promotores Armando Sala Berendes y Rafael Regalado, dos nombres que se barajaban como posibles aspirantes a la presidencia y que se hicieron a un lado cuando el dianense anunció su candidatura. En principio Fempa, Facpyme y Baño (propietario de Tescoma y que ha colocado a más de una decena de afines en las candidaturas) no verían con malos ojos a Sala y Regalado, si hay acuerdo sobre el resto.

Lo que no verían de la misma forma, por ejemplo, es que se diera entrada en el comité a alguno de los 12 miembros que formarán parte del pleno en representación de las empresas que mayores aportaciones económicas realizan a la institución. Entre estos estaría el presidente de Cepyme Alicante, Cristóbal Navarro, que ha elegido esta opción para garantizarse un asiento.

Aunque ayer no se trató el asunto en profundidad, según fuentes conocedoras del encuentro, lo cierto es que uno de los temores de estas asociaciones es que, para evitarse problemas con Navarro -siempre dispuesto a presentar batalla en todas las organizaciones donde está-, Riera pudiera caer en la tentación de ofrecerle la vicepresidencia primera de la Cámara, lo que abriría la puerta a que el máximo responsable de Cepyme acabara presidiendo la institución, en el caso de que el promotor se retirara antes de tiempo. Un acuerdo que, eso sí, Riera niega por activa y por pasiva.

Además, estos sillones para las empresas que más pagan han salido más baratos de lo previsto inicialmente. En un principio, las recomendaciones aprobadas por el Pleno de la Cámara establecían en 4.000 euros la aportación mínima que deberían realizar las empresas para entrar por esta vía, pero la falta de candidatos obligó a dejarlo en la mitad de dinero.

El encuentro con los representantes del Metal y del Comercio no fue el único que ayer mantuvo Juan Riera dentro de la ronda de contactos con la que pretende garantizarse su entrada en el pleno de la Cámara y, posteriormente, la presidencia de la institución. Además de presidir un pleno, el dianense también comió con sus antecesores Antonio Fernández Valenzuela y José Enrique Garrigós en busca de apoyos. Este último ha decidido presentarse a las elecciones por el grupo de exportadores -donde hay 12 candidatos para ocho asientos- por lo que un pacto podría beneficiar a ambos, al asegurar a Garrigós su sillón en el pleno a cambio de que éste le diera su apoyo y el de otros miembros cercanos a él -como los representantes del mármol- para la presidencia. También durante este encuentro Juan Riera tuvo que negar la existencia de ningún pacto para dar la vicepresidencia a Cristóbal Navarro e, igualmente, Garrigós y Valenzuela le reclamaron un comité de consenso.

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