El futuro de las pensiones continúa siendo una de las preocupaciones principales que afectan a los ciudadanos. El último barómetro del CIS, del mes de noviembre de 2017, le sitúa como uno de los problemas principales que creen los españoles que les afectará "personalmente". Solo por debajo del paro, problemas de índole económico, corrupción, política y sanidad.

Esta intranquilidad crece a medida que se multiplican los mensajes negativos (agotamiento del fondo de reserva, informes y recomendaciones de organismos internacionales como el FMI, revalorizaciones mínimas, etc.) y en el lado contrario se echan en falta anuncios que refuercen la viabilidad del sistema a largo plazo y que garantice que todos recibiremos nuestra pensión cuando dejemos de trabajar.

La propuesta del PP para reformar las pensiones. Vídeo: Flow

De hecho, la Comisión de Seguimiento del Pacto de Toledo, que reúne a todos los partidos políticos, lleva más de un año negociando cambios en el sistema de pensiones, pero sin presentar ninguna sola recomendación cuando estaba previsto hacerlo ya en la primavera de 2017.

En medio de esta espera, el Gobierno acaba de deslizar una primera propuesta, que, a falta de conocer detalles muy importantes, al menos puede suponer una mejora para parte de los futuros pensionistas.

Más años de cotización por una pensión superior

Aunque en un principio se filtró que la propuesta que llevará el Partido Popular a la Comisión de Seguimiento era la posibilidad optativa de elegir todos los años cotizados para el cálculo de la pensión y no sólo los 21 últimos para el cálculo de la pensión, al final la proposición es distinta, aunque también más positiva: elegir los años entre todos los cotizados, aunque sean alternos, y así optar por aquellos en los que esta cotización sea más elevada.

Esta medida favorece especialmente a aquellos que hayan perdido su trabajo en los últimos años y que no lo haya recuperado o que, aunque haya conseguido otro empleo, lo haya hecho en condiciones económicas más desfavorables y por este punto su pensión pueda ser inferior.

Las posibles limitaciones de esta medida

Hasta aquí todo es positivo, pero faltan los condicionantes, muchos de los cuales se desconocen aún.

En primer lugar, no es una oferta para todos. Actualmente, el mínimo para acceder a la jubilación anticipada es de 35 años y de 36 años y seis meses para la jubilación ordinaria, e irá aumentando hasta los 38 años y seis meses en 2027. Esto hace que, si actualmente si pueden tener acceso una parte considerable de los trabajadores, a medida que pase el tiempo, este porcentaje será menor. Esto es así, porque la media de años cotizados tiene una clara previsión de descenso debido a la incorporación más tardía al mercado laboral y la temporalidad de los contratos.

El PP plantea que se pueda calcular la pensión de jubilación teniendo en cuenta toda la vida laboral

El PP plantea que se pueda calcular la pensión de jubilación teniendo en cuenta toda la vida laboral

El PP plantea que se pueda calcular la pensión de jubilación teniendo en cuenta toda la vida laboral. Vídeo: AGENCIA ATLAS Foto: GETTY IMAGES

En segundo lugar, nos encontramos con la primera incógnita, que aún no se ha desvelado en la propuesta y que, presumiblemente, se deje la potestad de determinarse a la Comisión de Seguimiento del Pacto de Toledo, los años de cotización necesarios para el cálculo de las pensiones. Como ya hemos mencionado, actualmente se utilizan para el cálculo 21 años, los últimos años de cotización, una cifra que se lleva incrementando desde el año 2013 y que llegará a los 25 años para el ejercicio 2022. En el caso de que se mantuviesen estos 25 años, un trabajador con 35 años de cotización sólo podría dejar de optar por los 10 peores para el cálculo de la prestación, con lo que el margen no es muy amplio, y es probable que se aumenten incluso estos años

Y para finalizar, tenemos una última incógnita, si se elevará la edad mínima para la jubilación. Desde este año, los trabajadores que quieran jubilarse en 2018 con el 100 % de la pensión (y no hayan cotizado 38 años y medio), tendrán que tener cumplidos 65 años y seis meses, de acuerdo con la reforma de las pensiones que se cerró en el año 2011 y que estipula que irá aumentando hasta llegar a los 67 años en el año 2027.

En este sentido, es muy probable que el "coste" de elegir los años de mayor cotización en lugar de los 21 últimos será no poder jubilarse a los 65 años, aunque los años cotizados superen los 38 años y medio, y hacerlo por la edad mínima que establece la normativa para los que han cotizado menos de estos años. Incluso, se especula que se podría estudiar que la edad de acceso a esta nueva posibilidad sea de 67 años.

Qué debemos tener en cuenta

Cualquiera de estas opciones obligaría a cotizar más, a estar más tiempo activo, para poder conseguir una pensión más elevada y nos obligara a comparar que conviene más económicamente, cobrar antes una pensión algo menor o esperar más para que esta sea superior.

Este nos lleva a la última consideración que debe tener un futuro pensionista si este plan sale adelante, cuando conviene optar por el mismo. A priori, como es opcional, el único problema consistirá en hacer cálculos previos entre ambas y ver la mejor de ambas. Pero si queda claro que el mayor beneficio lo tendrán quienes hayan tenido una caída muy brusca en la cotización y esta se ha concretado en no más de 10-12 años. Además, siempre debemos tener en cuenta que no todo lo cotizado va a la pensión y que existen topes máximos a la misma.

En definitiva, un paso adelante, positivo para una parte de los trabajadores actuales, aunque su peso vaya a caer en los siguientes años por el menor tiempo cotizado de media, pero que debe unirse a otras medidas que consoliden nuestro sistema de pensione, especialmente en la financiación del mismo, el mayor problema que hoy en día se enfrenta.