El optimismo sigue instalado entre las empresas familiares de la Comunidad Valenciana, que en el último año han visto mejorar notablemente sus negocios. En concreto, hasta un 81% de la firmas de este tipo de la autonomía asegura que durante los últimos 12 meses han logrado incrementar su facturación, han contratado nuevo personal y, además, han elevado su actividad en el extranjero.

Así lo refleja la edición autonómica del sexto Barómetro de la Empresa Familiar elaborado por KPMG, en colaboración con las organizaciones territoriales vinculadas al Instituto de la Empresa Familiar, entre ellas la alicantina Aefa. Una encuesta que destaca las mejores perspectivas que tienen las firmas valencianas ya que hasta un 88% de las consultadas asegura que el próximo ejercicio será "positivo" o "muy positivo", ocho puntos más que la media nacional.

Una confianza en el futuro que viene avalada por los mejores resultados del último año ya que, frente a las cifras de la Comunidad, a nivel nacional sólo el 70% de las compañías encuestadas había elevado su facturación y sólo el 59% había incrementado su plantilla.La competencia, el principal reto

A pesar de este optimismo, las empresas familiares valencianas también ven en el horizonte importantes retos. El principal de ellos es el aumento de la competencia, que señalan el 57% de los consultados, seguido por la "guerra" por captar talento, a la que señalan otro 36%.

En cualquier caso, por encima de estas cuestiones, la prioridad para la mayoría de las firmas familiares de la autonomía para los dos próximos años va a ser incrementar la rentabilidad, una vez que se ha superado lo peor de la crisis, donde el mayor problema era la falta de negocio. Así lo apuntan 57% de los participantes en el estudio, que también reflejan que un 75% de las compañías tiene previsto realizar nuevas inversiones en los próximos 12 meses. Estas inversiones se centrarán en la innovación y nuevas tecnologías (91%), el desarrollo de la actividad principal (64%) y a los departamentos de recursos humanos (55%).

Garantizar el traspaso de la propiedad de la empresa familiar y los planes de sucesión son otros de los aspectos más relevantes para estas compañías. En este sentido, el 20% de las compañías familiares españolas admite que está valorando traspasar la gestión de la empresa en los próximos 12 meses y un 10% reconoce estar pensando en traspasar la titularidad de la misma, mientras que solo el 6% reconoce que se plantea vender la sociedad.

La importancia de mantener el legado en la empresa familiar queda confirmada por 9 de cada 10 compañías, que destacan el control del negocio dentro de la familia y la mejora de la comunicación entre las distintas generaciones al ser preguntados por los factores de éxito. En cualquier caso, para el 95% de las empresas familiares españolas el primer elemento clave sería contar con unas buenas estructuras de gobierno corporativo y de procesos.