El presidente de Francia, Emmanuel Macron, firmó ayer cinco decretos de la reforma laboral. Se trata de la mayor revisión económica que ha llevado a cabo desde que llegó al poder en mayo. «Esta revisión os facilita los medios para decidir por vosotros mismos». «Es una reforma que otorga confianza a empresas y trabajadores», publicó Macron en su cuenta de Twitter tras la firma de los decretos. Las nuevas disposiciones, discutidas previamente con los sindicatos, limitarán las indemnizaciones por despidos injustos, lo que dotará a las compañías de una mayor libertad a la hora de despedir empleados y facilitará la aceptación de ciertas condiciones de trabajo.

Macron aseguraque los decretos se convertirán en ley en los próximos días, aunque no tendrán efecto en la práctica hasta que se firmen a finales de 2017 otras resoluciones que afinen los detalles de la reforma.Miembros de varios sindicatos se han opuesto a la enmienda y protestaron en su contra el pasado jueves en diversas ciudades de Francia, aunque el número de manifestantes fue menor que en las concentraciones de la semana pasada. La revisión se trata de la primera de las reformas que Macron ha prometido ejecutar para revitalizar la economía y disminuir el paro, entre las que se incluyen modificar los subsidios por desempleo y el sistema de pensiones.