Las empresas de la construcción de la provincia han aumentado sustancialmente el número de trabajadores que tenían dados de alta en la Seguridad Social en julio de 2013, uno de los años más duros de la reciente crisis. Ahora, el sector ha ganado en tamaño -tanto en número de empresas como en mano de obra- gracias a la progresiva consolidación del repunte de la actividad inmobiliaria iniciada hace más de año y medio en la zona de la Vega Baja para después extenderse a la provincia.
Los 26.978 empleados y las 5.696 empresas provinciales de la construcción inscritas en el sistema suponen ya un 25,8% más de compañías activas que en julio de hace cuatro años y un incremento del 47,2% en el número de trabajadores, según los últimos datos publicados por el Ministerio de Empleo y Seguridad Social en relación a las empresas con empleados inscritas en el sistema.
Aunque, en realidad, todos los sectores provinciales han evolucionado al alza en este periodo, en consonancia con los momentos de recuperación económica, es el inmobiliario el que arroja los mayores crecimientos. También fue el que acusó el mayor ajuste en la última década, precisamente, al pincharse la «burbuja» de la época expansionista.
Además, el incremento ha sido progresivo. En el último año también es el que mayor aumento porcentual ha presentado. Hace dos meses, la construcción contaba ya con 5.969 empresas, 379 (7,1%) más que hace un año y 26.978 empleados cotizantes, que representan 3.056 (12,7%) más que hace doce meses.Un avance que reflejan las estadísticas, pero que es visible en las calles, donde las grúas de la construcción han vuelto a dominar el paisaje en zonas como la Vega Baja, Alicante o las Marinas.
Avance provincial
En conjunto, la provincia cuenta ahora con 59.644 empresas con trabajadores inscritas a la Seguridad Social. Una cifra que representa un incremento de 6.209 compañías más que hace cuatro años. Y su masa laboral la configuran 462.404 empleados. En ambos casos, se experimentan destacados incrementos -del 11,6%, en el caso de las mercantiles, y del 21,5%, en el de la mano de obra- en relación a julio de 2013.
Y de ese total, el 76% de las firmas activas se corresponden con la multidisciplinar actividad de los servicios, que no sólo incluyen los negocios vinculados con el sector turístico o el comercio, sino también los del transporte, las consultorías u otras empresas que dan servicio a otras compañías, entre otras. En estos momentos, son 45.650 empresas con trabajadores las que operan en la rama de los servicios, frente a las 41.105 de julio de 2013. Y el total de trabajadores cotizantes se eleva a 334.841, un 18,2% más que hace cuatro años. Los negocios vinculados al turismos son los que mejor han podido sortear la crisis, dado que durante le periodo recesivo la cifra de visitantes de la provincia se ha ido incrementando, llegándose a registrar cifras récord.
La industria
Y entre las principales actividades, la de la industria es la segunda que concentra mayor número empresas y mano de obra. Aunque en el caso de las compañías, la construcción se acerca progresivamente, ya que las industrias activas en la provincia se sitúan en 6.293 y el ladrillo ya tiene 5.696. El total de negocios industriales representan un aumento del 5,2% en el periodo analizado. No obstante, en el último año las comparativas del balance del Ministerio reflejan que la industria ha perdido 72 firmas en relación a julio de 2016, aunque no ha reducido el número de empleados. Sus 77.727 trabajadores suponen un aumento del 1% en el último año y del 15,5% en relación a hace cuatro, cuando tenía inscritos 67.258 trabajadores. De forma similar al sector turístico, la industria ha podido capear el temporal de los años de crisis por la vía de la exportación.
Las actividades manufactureras se han anotado durante varios años importantes crecimientos en su comercio exterior.
Si bien, en el último año, sobre todo el calzado, ha invertido la tendencia por la caída de la demanda en sus mercados más tradicionales. Los exportadores han acusado los efectos del proceso del «Brexit» en Reino Unido, la inestabilidad europea, en general, y el impacto en el consumo de los atentados yihadistas en países como Bélgica, Alemania o Francia. Estos dos últimos son sus dos primeros clientes.
Por su parte, el sector agrario provincial es el que presenta los avances más reducidos en los últimos cuatro años. Las poco más de 2.000 empresas suponen un crecimiento del 9,4% en relación a hace cuatro años y los 12.858 empleados son un 10,7% más.
