La recuperación económica ya está impulsado el empleo en la Comunidad, aunque a algunos sectores parecen no haber llegado todavía sus efectos. Dos de las actividades claves en el mercado laboral autonómico y alicantino, como la hostelería y el comercio, muestran la cara y la cruz de esta nueva fase de reactivación, tras una década de intensa crisis. Mientras las tiendas han perdido un 3,1% de asalariados en el segundo trimestre del año en relación al mismo periodo de 2016, bares, restaurantes y cafeterías de la Comunidad aumentan sus plantillas un 1,7%, según los datos de la última Encuesta de Población Activa (EPA).
La evolución a la baja del número de trabajadores en el comercio sorprende a las organizaciones sindicales en un momento en que el empleo ha crecido en la autonomía un 3,8%, hasta superar los 1,6 millones de asalariados, y cuando ésta repuntando el consumo doméstico. «Son más de 8.000 trabajadores menos», lamentaba Yolanda Díaz, responsable de Empleo de UGT en l'Alacantí-La Marina. La dirigente sindical considera que no existe un factor único al que achacar estae retroceso. No obstante, aludía a que el sector «está compuesto por pequeñas unidades, muchas veces de carácter familiar a las que la competencia de grandes superficies que lo tienen todo, está afectando».
Avanzar en la digitalización
Además, en este escenario, desde distintos ámbitos empresariales se ha subrayado la necesidad de avanzar en la digitalización de las pymes para subirse al carro de la venta «online». Las Cámaras de Comercio y el Gobierno, incluso, lanzaron este año lanzaron un plan para impulsar este proceso en el sector. Por su parte, desde la Federación Provincial del Pequeño y Mediano Comercio (Facpyme) contextualizaban estos datos dentro de «un descenso de la actividad, que provoca un descenso o estancamiento de la contratación», señalaba Francisco Rovira, secretario general de Facpyme. No obstante, el representante sectorial entendía que esta reducción del empleo «es coyuntural y seguro que en los dos próximos trimestres habrá un repunte del empleo».
Aun así, Rovira también admitía que a comienzos de año se detectó un «pico» de clausura de tiendas. En una información de este periódico de finales de enero, se recogía el testimonio de varios comerciantes que avanzaban que al término de las rebajas de invierno tenían previsto cesar en la actividad por un encarecimiento de los alquileres. Un informe del portal inmobiliario Idealista.com apuntaba entonces que los locales comerciales en las capitales de provincia son uno de los productos de inversión inmobiliaria con mayor rentabilidad. Y aludía a que «comprar un local en España para alquilarlo ofrece una rentabilidad bruta del 8,5%».
La cara en la evolución del empleo la muestra el sector de la hostelería, que ha ganado 2.500 ocupados en un año, a tenor del balance del segundo trimestre, periodo que ha recogido el impulso de la contratación por la Semana Santa (abril), además de que las actividades directamente vinculadas con el turismo anticiparon a mayo y junio muchas de las contrataciones estivales por el importante flujo de turistas debido a la buena climatología que registraba la Comunidad.
Menos empleados de banca
Al margen de estas dos actividades claves, junto a los hoteles, en la provincia, el sector que más empleo ha perdido de abril a junio de este año ha sido el financiero, que ha reducido un 22,2% el número de sus asalariados en relación a un año antes. Detrás de este destacado recorte se encuentra, entre otros factores, el proceso de concentraciones. A principios de junio, Bankia absorbía al Banco Mare Nostrum (BMN) y a finales, el Santander compraba el Popular ante su inviabilidad. Además, las entidades iniciaron ya el pasado año un periodo de clausura de oficinas para ajustar gastos, avanzar en la digitalización o para transformar sucursales en aras de la especialización para atender la demanda.
Los interinos, en educación
Por otra parte, debido a la «pura estacionalidad enquistada» también se produce un descenso de asalariados en la actividad educativa (-19,2%), «sobre todo por el personal interino, que al inicio del verano terminan sus contrataciones y pasan al desempleo», denuncia José María Ruiz Olmos, secretario de comunicación de CC OO en l'Alacantí-Les Marines. De forma paralela, el colectivo de empleados del hogar registra una reducción de asalariados de un 12% en relación a un año antes. «No pasa desapercibido que, pese al repunte de la economía y del empleo, en el segundo trimestre del año se produce una reactivación o pérdida de puestos en actividades como feminizadas, como el comercio, la educación o los empleados del hogar», incidían desde el sindicato UGT.
