La agencia Standard & Poor's (S&P) ha revisado de 'positiva' a 'estable' la perspectiva del rating 'A-' de Banco Santander al considerar que la compra de Banco Popular "retrasará" una posible mejora en el perfil crediticio de la entidad presidida por Ana Botín, informó en un comunicado.

S&P, que confirma la nota de solvencia de Banco Santander un escalón por encima del rating soberano de España, considera que la absorción de Banco Popular, a pesar de ser "gestionable", retrasará una mejora potencial en el perfil crediticio de la entidad durante los dos próximos años.

"La adquisición de Popular, a pesar de su tamaño significativo y los riesgos que conlleva, será manejable para el banco. Sin embargo, creemos que retrasará la mejora potencial del perfil crediticio de Santander en los próximos dos años, incluso en un entorno económico y operativo probablemente más favorable en España", reza el comunicado de la agencia de calificación.

No obstante, S&P cree que la adquisición de Banco Popular es "positiva" para Santander desde una perspectiva empresarial, ya que fortalecerá la posición del banco en España y, particularmente, en el negocio de pymes, donde alcanzará el liderazgo del mercado con una cuota del 25%. "Reforzará su capacidad para fijar precios y sus perspectivas de crecimiento", apostilla la agencia.

En relación con la ampliación de capital en 7.000 millones de euros, S&P también considera que es "positiva" al permitir que el impacto de la operación sobre el capital ajustado al riesgo sea "moderado".

Además, S&P sostiene que la adquisición de Banco Popular por el precio simbólico de un euro otorga a Santander una "oportunidad" para mejorar la rentabilidad a través de "mejoras de eficiencia". "La adquisición de Banco Popular se produce en un momento en que los riesgos económicos y del sector financiero en los mercados españoles, a nuestro juicio, en retroceso", concluye S&P.