La naviera Baleària continúa con su expansión y, desde el próximo 20 de junio, pondrá en marcha la que será su cuarta línea internacional, que enlazará la ciudad marroquí de Nador con el puerto de Almería. La naviera realizará dos salidas diarias desde ambos puertos (excepto los martes y los jueves, que solo hará una) y el buque encargado de realizar la conexión será el ferri Nissos Chios, que cubrirá el trayecto en cuatro horas.

Con esta nueva línea, la compañía con sede en Dénia sigue su proceso de internacionalización que empezó precisamente en Marruecos en 2003, cuando inició las conexiones entre Algeciras y Tánger. Además, la firma presidida por Adolfo Utor también opera desde hace un año otro enlace entre la ciudad argelina de Mostaganem (Argelia) y València, además de la línea que mantiene entre Bahamas y Florida, en el Caribe.

En total, en 2016 la naviera transportó más de 705.000 pasajeros en las rutas internacionales, lo que supuso el 20% sobre el total de pasajeros de Baleària. Con esta nueva ruta, la naviera se acerca al objetivo de alcanzar el 50% de la facturación del Grupo en los tráficos internacionales, que actualmente es del 20%.

Capacidad para 1.200 pasajeros

El ferri Nissos Chios, uno de los mejor valorados de la flota en las encuestas de satisfacción de los clientes, tiene una capacidad para 1.200 personas y 350 vehículos con una velocidad de 28 nudos. El buque dispone de una amplia gama de servicios como restaurante self-service y a la carta con comida halal certificada, bar, tienda, zona de rezo, servicios específicos para las familias, y espacio para las mascotas. El buque opera actualmente las conexiones con Melilla desde Almería y Málaga, rutas en las que Baleària va a volver a programar este verano el buque de alta velocidad Pinar del Río, que ya operó el año pasado.

Por otra parte, la compañía ha destacado programas de contenido social que realiza en Marruecos para implicarse en el desarrollo del país, para lo que también apuesta por integrar a trabajadores locales. Casi el 14% de los empleados de la naviera son de origen extranjero, de los cuales la mitad eran procedentes de Marruecos.