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Diez de cada cien trabajadores ocupados en la Comunidad buscan otro empleo

Más de 185.000 empleados autonómicos desean cambiar de puesto de trabajo

El número de trabajadores de la Comunidad que tiene un empleo pero que se encuentra en búsqueda activa de otro por inseguridad laboral o para mejorar sus condiciones laborales, ha aumentado durante los años de crisis. Más de 185.100 ocupados se encuentran en esta situación en la autonomía y representan 63.900 más que en 2007, lo que supone un aumento del 52,7%, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) relativos a la Encuesta de Población Activa (EPA) entre 2007 y 2015, último año computado por el INE sobre condiciones de trabajo.

Encontrar un empleo mejor, que sea más adecuado a la formación o poder obtener mayor sueldo son aspiraciones que tradicionalmente han motivado a muchos trabajadores. No obstante, durante los años de la crisis este empeño se ha ido acentuado entre la población ocupada, a medida que la «precariedad laboral o la inseguridad laboral iban ganando terreno», advierten los sindicatos. Si en 2007, cuando todavía la crisis no había mostrado todo el impacto negativo que podía llegar a causar, las 121.200 personas de la Comunidad con un trabajo que pretendían otro mejor suponía un 5,4% de los 2,2 millones de ocupados, ahora ya rozan el 10% (9,8%), al ser 185.100 los que buscan otra opción laboral de un total de 1,8 millones ocupados.

Desde hace nueve años la cifra no ha parado de crecer. Yaissel Sánchez, secretaria territorial de UGT en l'Alacantí-La Marina, atribuye este incremento «a los estragos que ha creado la crisis, con una pérdida continuada del empleo, lo que ha generado incertidumbre y miedo entre los que tenían un trabajo que creían estable». Por su parte, José María Ruiz Olmos, responsable de comunicación de CC OO en la misma comarca, destaca que la «precariedad laboral que se ha ido creando, especialmente desde la reforma laboral, y en mayor medida entre las mujeres, hace que este colectivo sea el que más busque un nuevo trabajo desde 2014». De los 185.100 ocupados a los que les gustaría tener otro puesto, destacan los más de 53.900 que lo hacen para mejorar sus condiciones. «Las motivaciones de la remuneración, los horarios o la jornada laboral suelen ser las más comunes. Uno puede estar muy contento con su empleo, pero quiere tener una mayor retribución o poder conciliar con la vida familiar», explica Sánchez.

Pero también, los hay que desean un puesto más conforme a su formación. Concretamente, son 16.200 y suponen un 50% más que en 2007. UGT incluye en este grupo sobre todo a los jóvenes. «Es un colectivo que suele estar muy cualificado, y que por la falta de oportunidades laborales durante la crisis, entraron al mercado laboral por la primera puerta que se les abría, pero ahora aspiran a tener un empleo más acorde con su cualificación», señalaba la dirigente ugetista. Entre los jóvenes también los hay que, aun estando estudiando o haber acabado la formación, buscan su primer empleo «para aportar ingresos a la economía familiar o poder emanciparse. Una aspiración que casi se ha convertido en una quimera para muchos en los últimos años», lamentaba Yaissel Sánchez.

Pero, además, un agudizado escenario de crisis y «a trabajadores con empleo les crea inseguridad y también buscan otra opción laboral.Las cifras de la EPA reflejan que en esta situación se encuentran 34.800 trabajadores en la Comunidad, que suponen un 161% más que en 2007. El porcentaje más elevado.

Por otra parte, los que exponen otras causas son 79.800 y sobre los que consideran provisional su empleo actual, no se especifican los datos en la Encuesta.

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