El presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, anunció ayer una próxima convocatoria para atraer «startup» internacionales a Bankia Fintech by Innsomnia, una iniciativa amparada por la entidad para incubar y acelerar nuevas firmas especializadas en tecnologías para el sector financiero. Goirigolzarri participó, junto al presidente de la Generalitat, Ximo Puig, en la inauguración de las instalaciones de este proyecto en la sede que ocupó en la Marina Real del puerto de Valencia el Team Germany durante la celebración de la Copa del América. En su intervención, el presidente de Bankia aseguró que la llamada a empresas extranjeras obedece a que «una de las características del cambio que se está produciendo en la sociedad es su carácter global». Y no solo eso, sino que la entidad está determinada a convertir este instrumento, pionero en España, «en referencia en Europa».

La primera promoción de Bankia Fintech está integrada por 14 empresas procedentes de Madrid, Asturias, Castellón, Alicante, Valencia y Barcelona y tratan de aportar soluciones a un campo muy variado de áreas financieras como el riesgo, autónomos, exportación, seguridad financiera o pagos por móvil.

Goirigolzarri, que explicó que la elección de Valencia como sede del proyecto se debe a que «ofrece, objetivamente, las mejores condiciones posibles para que el talento y el emprendimiento se desarrollen de una forma extraordinaria», enmarcó el impulso de Bankia a esta iniciativa en el cambio de hábitos de la clientela y la necesidad de la banca de ser protagonista en la revolución tecnológica que ya ha llegado. Para Ximo Puig, esta aventura es un paso más «hacia la plasmación del nuevo modelo económico que persigue la Generalitat». Además, aseguró que la productividad es un factor que «aleja» a la economía valenciana de «los mercados competidores», de ahí que «sea fundamental impulsar tecnologías como las fintech».

El director corporativo de Estrategia e Innovación Tecnológica de Bankia, Ignacio Cea, añadió que «no podemos estar al margen del valor potencial que generan para nuestros clientes las propuestas de las fintech. Debemos tratar de incorporarlas a nuestro catálogo de servicios, y tenemos que hacerlo manteniendo la independencia de quienes las han generado para así sacar el máximo valor de ellas. Hay que hacerlo, por tanto, en colaboración con ellas», que es la fórmula elegida en este caso.