Sin dejar de admitir que «hemos avanzado algo», Mar Esquembre alerta de que aunque exista una ley, «por proclamarlo no cambia» la situación de desigualdad entre hombres y mujeres, en este caso, en el ámbito laboral y en la equiparación del acceso a cargos directivos. Ese techo de cristal al que se enfrentan muchas profesionales, ya que en las ocupaciones técnicas, la diferencia numérica se reduce. Según la última EPA, en Alicante hay trabajando 76.500 hombres en este puesto y 67.100 mujeres. El vuelco se produce en las categorías de contables y empleados de oficina. Hay sólo 27.300 hombres, frente a 48.800 mujeres. «Hace falta mucha pedagogía y en eso estamos fallando», añade la profesora titular de Derecho Constitucional en la UA, y presidenta de la Red Feminista de Derecho Constitucional. Esquembre cree que además de la ley, «hacen falta planes de igualdad y la educación en igualdad. El conocimiento se nos transmite de una manera neutra, con sujetos neutros que obedecen a un estereotipo masculino. Lo llevamos aprendiendo así muchos siglos y eso no ha cambiado». Tampoco son suficientes los días al año en que la mujer es protagonista. Uno de ellos el 8 de marzo (Día de la Mujer Trabajadora) o el 25 de noviembre contra la violencia de género.