La precariedad laboral sigue marcando la recuperación económica en la provincia y cada vez lo hace con mayor intensidad. El rechazo de las empresas a asumir nuevos costes fijos ha disparado la utilización de contratos menor duración hasta el punto de que son los empleos por días -e, incluso, por horas- los que más crecen en Alicante y con bastante diferencia, según denuncia un informe realizado por el sindicato UGT en base a los datos oficiales del Gobierno de los nueve primeros meses del año.
Así, mientras que el número total de contratos ha crecido alrededor de un 10% con respecto a las cifras del año pasado, el de las ocupaciones de menos de una semana de duración se ha disparado un 21,32%, al pasar de las 68.270 registradas entre enero y septiembre de 2014 a las 82.828 contabilizadas en el mismo periodo de este ejercicio. O, en otras palabras, que uno de cada cinco empleos que logran los alicantinos dura menos de siete días.dura menos de siete días.
Una situación que, según la autora del informe, la secretaria de Empleo de UGT en l'Alacantí, Yaissel Sánchez, se encuentra detrás del aumento de la desigualdad y del deterioro de las condiciones de vida que sufren muchos trabajadores en la provincia a pesar de la mejora económica.
Entre otras porque, además de tener una duración extremadamente corta, buena parte de estos contratos también son a tiempo parcial, lo que supone ya «el colmo de la precariedad», en palabras de Sánchez. En concreto, de los 82.828 empleos de menos de una semana de duración formalizados hasta el pasado mes de septiembre, sólo 42.015 fueron a jornada completa mientras que otros 40.813 fueron por horas.
Un empleo «empobrecedor», en palabras de la dirigente sindical, con graves consecuencias para quienes lo sufren. Y es que, a las dificultades para llegar a final de mes con unos ingresos tan bajos e «inestables» como los que conllevan este tipo de ocupaciones, hay que sumar el hecho de que la mayoría de estos trabajadores no logra acumular suficientes días de cotización para cobrar el subsidio de paro cuando lo necesitan y, a la larga, también afectará a sus pensiones.
Igualmente, desde UGT vinculan esta creciente inestabilidad en el empleo con el repunte de la siniestralidad laboral, que se ha incrementado un 12% y ya se ha cobrado once vidas en la provincia en lo que va de año.
Más control
Ante este panorama, el sindicato reclama un mayor control por parte de la Inspección de Trabajo de las empresas que abusen de estos contratos de «muy corta duración» ya que, según denuncia, en muchas ocasiones ocultan situaciones de fraude o de explotación laboral. Así, en concreto, reclaman «aumentar las sanciones y penalizar el uso injustificado» de este tipo de contrataciones, en especial en aquellas empresas donde se realicen de forma «habitual y reincidente». En este sentido, como ya informó este diario, la Inspección tiene previsto reforzar el año que viene la vigilancia de aquellas compañías que presentan un elevado índice de ocupación temporal y a tiempo parcial para comprobar que respetan la legalidad.
