El presidente del Banco Sabadell, Josep Oliu, se comprometió ayer con la Generalitat a mantener su actual política de no practicar desahucios forzosos, que le ha llevado a ser una de las pocas entidades que mantiene un equipo especializado para atender estas situaciones y buscar soluciones alternativas. Así, lo transmitió Oliu durante el encuentro que mantuvo con el jefe del Consell, Ximo Puig, y en el que también ofreció su apoyo para la puesta en marcha de la futura Agencia Valenciana de la Innovación.
Tras la reunión, el presidente del Sabadell señaló que continuarán «esforzándose para que ninguna familia se quede sin casa» por culpa del banco, y menos en un momento en el que, según destacó, «tras años difíciles, por fin crecen las inversiones y la concesión de hipotecas», por lo que «podemos mirar al futuro con esperanza».
Oliu reiteró, como en otras ocasiones, que el banco que preside «no ha efectuado ningún desahucio a personas en riesgo de exclusión social» y mostró su voluntad de que siga siendo así, en colaboración con las administraciones. En este sentido, aunque no concretó ninguna acción, Puig reivindicó que el objetivo del Gobierno valenciano es «acabar con los desahucios», para lo que tiende la mano al Sabadell con el fin de «negociar que las familias desahuciadas puedan tener una segunda oportunidad» y no caigan en la exclusión social.
El jefe del Consell anunció, además, que la Generalitat y el Sabadell «seguirán trabajando conjuntamente» para beneficiar a las familias y las empresas de la autonomía. Al respecto, Puig le arrancó ayer a Oliu el compromiso de la que entidad colabore en la futura Agencia Valenciana de la Innovación, la gran apuesta del dirigente socialista para dinamizar la economía local y promover el tan ansiado cambio de modelo productivo de la región.
Se trata de una promesa electoral que lanzó el propio Puig durante la campaña electoral y que recordó el lunes de la semana pasada durante su conferencia en el Fórum Europa, en cuyo diseño ha participado el exconseller de Industria Andrés García Reche, que durante los mandatos de Joan Lerma ya impulsó los institutos tecnológicos.
La intención es que el nuevo organismo ponga fin a la actual fragmentación de las políticas de innovación -repartida entre los citados institutos, las universidades y otros departamentos de la administración- y que esté dirigido por expertos independientes. En este sentido, ante la actual falta de recursos del Consell, debido a la infrafinanciación que recibe desde el Gobierno central, el Ejecutivo autonómico considera clave la implicación de las entidades financieras que puedan aportar la financiación necesaria para llevar a cabo el proyecto. De ahí que ayer Ximo Puig no quisiera desaprovechar la ocasión de trasladar la propuesta al banquero catalán.
Eso sí, según las fuentes consultadas, esta petición de colaboración no llegó a cifrarse en ningún momento.
Preocupación por el paro
En este sentido, durante la reunión, Oliu le trasladó al president la «preocupación» del Sabadell por los temas sociales, así como su voluntad de «volver a trabajar para buscar soluciones que acaben con el problema del paro», que, según dijo, es la principal consecuencia de la «larga y profunda crisis que hemos superado».
