Tesla Motors está revolucionando el sector energético. Nacida en el año 2003, esta compañía norteamericana radicada en Silicon Valley está centrada en el negocio de la fabricación de coches eléctricos. Sin embargo, en las últimas semanas esta empresa se ha hecho especialmente conocida por la presentación de un nuevo producto que aparentemente está llamado a revolucionar el mercado energético en el ámbito doméstico y pequeños negocios. Se trata de las baterías de Tesla, unos dispositivos de almacenamiento de energía ideados para los hogares y pequeñas empresas y realizadas con tecnología ion-litio.

Su objetivo es mejorar la eficiencia con la que almacenamos la energía eléctrica que se obtiene a través de fuentes renovables y contribuir a reducir el coste de su factura eléctrica de las familias. A la espera de confirmar el éxito de estas nuevas baterías, algo que todavía genera muchas dudas, vamos a desglosar en estas líneas cuáles son las principales energías renovables a las que se puede recurrir en nuestros hogares -aunque dependerá del tipo de vivienda, superficie, características€- con el objetivo de reducir nuestra factura energética.

Placas solares fotovoltaicas. Dentro de las energías renovables, estas instalaciones figuran entre las que gozan de mayor éxito. Se trata de una fuente de energía que produce electricidad de origen renovable a partir de la radiación solar. Así, con un sencillo kit de autoconsumo integrado por una placa solar, un inversor y un cable de conexión a la red podremos obtener un ahorro importante en nuestra factura eléctrica.

Placas solares térmicas. Con estas instalaciones podemos aprovechar la energía del Sol y destinarla a cocinar, calentar agua, la calefacción€ De esta manera, gracias a la utilización de estas placas también podemos conseguir un ahorro significativo en la factura energética de nuestro hogar.

Energía mini eólica. El viento es otra fuerza de la naturaleza que podemos aprovechar también en nuestros domicilios. En este caso, este tipo de energía nos permite el aprovechamiento de los recursos eólicos mediante la utilización de aerogeneradores de potencia inferior a los 100 kW. Existen una gran cantidad de marcas y modelos de pequeños aerogeneradores domésticos que se instalan en un pequeño mástil o soporte y con los que podremos generar energía eléctrica para alimentar a nuestra vivienda.

Biomasa. La instalación de una caldera de biomasa también nos puede ayudar a ahorrar en nuestra factura energética. Huesos de aceita, pellets, cáscaras de frutos secos, residuos forestales€ son susceptibles de convertirse en el combustible de la caldera de biomasa. Gracias a esta materia orgánica, podemos calentar el agua o la calefacción, que podemos aprovechar con la red de radiadores y conducciones existente en nuestros hogares.

Energía geotérmica. En este caso, la fuente energética es el calor que emana del interior de la Tierra. Gracias a su poder calorífico, podemos aprovechar esta energía para utilizarla para calentar el agua, la calefacción€ Mediante unos colectores que normalmente se colocan en un espacio exterior, podemos absorber la energía del subsuelo y reaprovecharla para nuestro hogar, con el consiguiente ahorro para nuestra factura.