Los «lobbies» no sólo son positivos, sino que son necesarios en una democracia avanzada, aunque, para ello, requieren de una buena regulación, algo en lo que España tiene un contundente suspenso en estos momentos. Esto es lo que vino a defender ayer la politóloga Inma Puig-Simón, que en su día fue asesora del Ministerio de Industria de José Montilla y del Gabinete de Presidencia, con José Luis Rodríguez Zapatero, y que, actualmente, dirige la firma de consultoría Ipslink Group. Y lo defendió en el marco del III Foro de Liderazgo Político y Gestión Pública organizado por Fundesem Bussines School, que se cerraba ayer con esta conferencia.

De entrada, Inma Puig-Simón admitió la «mala prensa» que rodea a los «lobbies», porque en no pocas ocasiones se les asimila a prácticas ilegales, y a actuaciones opacas y poco transparentes. Ahora bien, dejó claro que nada está más lejos de la realidad de un «lobby» que esta imagen. De hecho, defendió que, de un lado, estos grupos de presión refuerzan la democracia. «Su labor es la de hacer ver al decisor público que hay varios intereses legítimos que pueden coincidir con el bien común», sostuvo. No sólo eso. Como aseguró, «un buen "lobby" puede mejorar la cuenta de resultados», ya que, según concretó, es un modo de «prevenir» y estar alerta ante cualquier cambio normativo, no sólo cuando esas modificaciones van a aprobarse de forma inminente.

A modo de ejemplo, esta politóloga citó modelos como el de Estados Unidos, Reino Unido o la propia UE, lo que le dio pie a afirmar de forma tajante que «España, a nivel de regulación, tiene un suspenso, porque nos falta mucho camino por hacer». Sí es cierto que admitió que, en estos momentos, hay una autorregulación parcial, pero no todos los grupos están inscritos y, por tanto, no es suficiente. A su juicio, una buena regulación española permitiría un funcionamiento más transparente de los «lobbies» y, por tanto, que puedan cumplir mejor su función. A falta de registros oficiales, sí indicó que los cálculos apuntan a que en España puede haber unos 500 colectivos de este tipo.