El consejero delegado del Sabadell, Jaume Guardiola, confirmó ayer que, finalmente, la entidad ha vendido a un fondo de inversión asiático las 3.800 hectáreas de terreno que la CAM compró junto a la promotora Hansa Urbana en la zona de Cabo Cortés, en México, una de los mayores pufos inmobiliarios de la antigua caja alicantina. La entidad llegó a invertir hasta 200 millones para adquirir el suelo pero el Gobierno mexicano tumbó el proyecto para construir un macrocomplejo en la zona por su valor ambiental. Posteriormente, el Sabadell trató de retomarlo reduciendo su tamaño pero tampoco logró que las autoridades lo aprobaran. Curiosamente, el banco está consiguiendo mucho más rendimiento de los terrenos y complejos de lujo que también «heredó» de Hansa en Cancún y en el Estado de México. Las dos sociedades que gestionan estos otros activos ganaron el año pasado 97,6 millones. d.n.
