La propuesta inicial de Coca-Cola Iberian Partners -que aún no se ha llegado a tratar en ninguna de las reuniones celebradas- contempla una indemnización de 30 días por año trabajado con un tope de 18 mensualidades para los trabajadores que sean despedidos o se acojan a las bajas voluntarias. Para los que acepten trasladarse -como pretende hacer la compañía con los trabajadores de Alicante- se ofrece una compensación única de 5.000 euros, sin garantías de mantenimiento del salario. Los prejubilados recibirían, según esta propuesta, el 70% del salario neto que les hubiera correspondido si hubieran seguido en la compañía hasta los 63 años de edad.