En el comunicado de la empresa, Coca-Cola Iberian Partners especifica que la reorganización y el nuevo modelo afectarán principalmente a las áreas de logística (en concreto a las de fabricación y almacenado) y las de soporte al nuevo grupo, que buscará funcionar en un «mapa circular» mediante las plantas productivas que conserva abiertas en A Coruña, Bilbao, Barcelona, Málaga, Sevilla, Santa Cruz de Tenerife y Valencia.

La compañía anunció que la nueva organización comercial estará centrada en un «nuevo modelo de venta y distribución más eficiente», con una nueva estructura operativa para la mejora en la gestión de equipos de frío y un nuevo modelo de reposición. Madrid, además de la sede social de la compañía, centralizará las operaciones comerciales, la comunicación y los departamentos legal y financiero, y contará con uno de los centros de servicio de atención al cliente.

Conflicto «duro»

Fuentes de la Federación Agroalimentaria de CC OO precisaron que con el ERE de Coca-Cola «habrá un conflicto y que será duro» tras rechazar las condiciones del expediente de la compañía, que «tiene unos beneficios de alrededor de 900 millones de euros y una facturación de más de 3.000 millones de euros». La federación avanzó que buscarán en la documentación presentada si la empresa acredita que CCIP es un grupo laboral y no sólo mercantil con el fin de desactivar legalmente el expediente.