El número de familias que no perciben ningún tipo de ingreso en la Comunidad Valenciana ha crecido en un año en 13.600 familias. El aumento, tal y como lo registra la Encuesta de Población Activa del segundo trimestre de 2013, deja una cifra global de 119.100 núcleos familiares sin recursos en las tres provincias. A pesar de que en Alicante hay un 0,7% más de hogares en esta situación entre abril y junio -300 familias-, la provincia «escapa» de la escalada de la precariedad familiar del último año al reducir esta variable en 1.600 hogares , un 4%, lo que establece el cálculo -la EPA se realiza en base a una encuesta telefónica- en 39.600 hogares.

Valencia se lleva la peor parte: entre el segundo trimestre de 2012 y el mismo periodo de este año ha registrado un aumento de los hogares sin recursos del 23%: son 65.600 familias, 12.500 más en un año. Castellón, donde hay 14.100 viviendas en las que no entra ningún ingreso, consiguió reducir en el segundo trimestre la cifra del periodo enero-marzo en un 17%, pero la comparativa anual echa por tierra el avance. Son 2.700 más que hace un año, lo que supone un incremento del 23%.

En el segundo escalafón de la precariedad de las familias que identifica la EPA, las viviendas que tienen a todos sus miembros en paro, la provincia de Alicante vuelve a demostrar mejor evolución que el resto de la Comunidad. Baja un 7,3% respecto al primer trimestre del año y un 14,2% en un año, lo que deja la cifra en 71.800.

En total, en la Comunidad hay 219.900 familias en las que ningún miembro tiene ocupación registrada, cifra que ha crecido un punto y medio en un año y algo más de dos en el segundo trimestre de 2013. De nuevo, Valencia, con 117.300 familias de parados y Castellón, con 30.000, experimentan un crecimiento que en ambos casos supera el 11% sis e comparan los datos de ambos años.

Además, la EPA recoge que la tasa de paro en el segundo trimestre en la Comunidad descendió sólo un 0,1%, situándose en el 29,1% gracias a la reducción que se produjo en la franja de edad de los 35 a 44 años, que cayó un 2,1% como consecuencia de las contrataciones del sector servicios. En el resto de edades la tasa de paro volvió a aumentar un trimestre más, especialmente entre las personas de 45 a 54 años, con un 1,2 % y de 55 a 64, con un 0,8% más.

El paro juvenil llega al 56%

No obstante, la población activa más joven, la que tiene edades comprendidas entre los 16 y los 24 años, es la que soporta la mayor tasa de paro, que se sitúa, tras la subida del segundo trimestre, en el 56%, al aumentar un 0,2% respecto al trimestre anterior y un 0,4% respecto al año anterior. Este colectivo, además, sufre cada vez con mayor intensidad la precariedad laboral, con una tasa de temporalidad del 68% tras aumentar en los últimos tres meses. En Alicante, la tasa de paro de juvenil se reduce en seis puntos y cuatro respecto a hace un año y se sitúa en el 52,4%.

Una precariedad, además, que continúa avanzando imparable. En el segundo trimestre del año se redujo la ocupación a tiempo completo en la Comunidad en 19.000 personas, lo que significa un descenso del 5% respecto al mismo periodo en 2012 (75.000 empleados menos). Por contra, la cifra de ocupados a tiempo parcial se incrementó en 21.200 personas (6,39 %). Es decir, la cuarta parte de la población asalariada carece de un contrato a tiempo completo.