La constructora alicantina Hansa Urbana reaccionó a primera hora de ayer para dar su versión sobre la posición de concurso de acreedores en la que le ha colocado la solicitud presentada por Caixabank en el juzgado de lo Mercantil número 1 de Alicante con el fin de cobrar la deuda que la promotora tiene con el banco. Fuentes de la mercantil aseguraron que «se está buscando un acuerdo» con Caixabank para que «retire la solicitud» y «se pueda poner fin a este conflicto». Además, en un comunicado remitido a este periódico, la empresa manifestó su «sorpresa» ante la iniciativa de la entidad bancaria; avanzó una reunión este mismo jueves de su consejo de administración para tratar la «previsible» oposición a la medida que ya ha sido admitido a trámite por el juzgado, como permite la Ley Concursal; avanzó su intención de «continuar con el normal desarrollo del negocio» y destacó que la dirección de Hansa cuenta con el «total apoyo de los accionistas mayoritarios».

Las citadas fuentes argumentaron también que la petición de concurso necesario de acreedores que se diferencia del voluntario en que es un acreedor de la sociedad quien lo solicita «no se sostiene porque no se cumplen los requisitos que marca la ley». En concreto, señalaron que «no se han producido impagos a los trabajadores, a la Seguridad Social, a Hacienda y a ninguna otra administración pública», tal y como, según Hansa, se recoge en la norma como preceptos para dar trámite a este procedimiento denominado anteriormente suspensión de pagos.

El juez puede rechazar la oposición de Hansa si previamente no se logra un acuerdo que provoque el paso atrás de Caixabank y decidir tras una vista si convocar o no el concurso de acreedores.

Los accionistas mayoritarios de Hansa Urbana son, según datos del registro mercantil, Management Service SL cuyo administrador único es Rafael Galea, presidente de Hansa y SabadellCAM la caja alicantina amplió su participación dos meses antes de que fuese intervenida por el Banco de España. Cada sociedad tiene «un 30% de las acciones», según fuentes de la empresa, mientras que el resto de participantes «tienen paquetes más pequeños de alrededor del 5%», según apuntaron las citadas fuentes en referencia a EBN, Cajasol Inversiones Inmobiliarias y otros «fondos de inversión».

El diario El Economista publicó el sábado que la deuda que reclama Caixabank y que ha motivado la presentación de la solicitud del concurso necesario de acreedores procede, precisamente, de Cajasol, entidad absorbida por el banco que preside Isidro Fainé y que, como se ha dicho, forma parte del accionariado de Hansa.

«No es por la deuda»

No obstante, fuentes de sociedades participantes en Hansa Urbana rechazaron ayer que el movimiento de Caixabank se deba «a una cuestión de deuda» de la constructora con el banco, sino que lo relacionaron con un problema de venta de acciones, sin explicitar qué participaciones están en discusión entre las partes.

Pese a ser una herencia de la cartera de la CAM el banco se ha deshecho de numerosos activos de la caja desde que culminó la toma de control a finales de 2012, el Sabadell mantiene la participación en Hansa Urbana. En la actualidad, la exposición del banco en Hansa ronda los 150 millones de euros, según fuentes de la entidad.

Caixabank, por su parte, manifestó ayer su postura de no hacer declaraciones en este asunto.