El Gobierno tiene previsto subir los impuestos al consumo en 2013 con el objetivo de reducir el déficit público y conseguir que cierre ese año en el 3% del Producto Interior Bruto (PIB), según anunció ayer el ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos. El ministro explicó después del Consejo de Ministros que el Ejecutivo llevará a cabo el próximo ejercicio una "modificación de la estructura impositiva en España", reduciendo los impuestos sobre el trabajo y aumentar la carga sobre el consumo.
En concreto, el Gobierno subirá el Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA), los impuestos indirectos, como los que gravan el alcohol, la gasolina o el tabaco, y reducirá las cotizaciones sociales. Con todo ello se conseguir una recaudación extra de unos 8.000 millones el próximo año, según anunció De Guindos. "Lo que estamos planteando es, en un momento en el que debemos dar el salto desde el punto de vista de la competitividad, reducir las cargas y la imposición sobre el trabajo, que en estos momentos está bastante penalizado, e incrementar la imposición del consumo, con un incremento neto de la recaudación que estaría en torno a unos 8.000 millones", afirmó.
La subida del IVA que realizó el Gobierno socialista, del 16 al 18%, generó unos ingresos extras al Estado en su día de 6.500 millones de euros y fue muy criticada por el Partido Popular. De hecho, el actual presidente del Gobierno, que ha rechazado en numerosas ocasiones la utilidad de esta medida, hizo célebre una frase: "Van va a subir el IVA hasta de los chuches y a todo el mundo".
El ministro de Economía justificó ayer el incremento impositivo por la necesidad de reducir los impuestos sobre el trabajo y subir los del consumo cuando se inicie la recuperación económica, que es lo que demandan a España algunos organismos internacionales como el Fondo Monetario Internacional (FMI). Además, recordó que "el problema de la elevación de la imposición indirecta en entornos depresivos es que acelera la caída, por eso se hace en 2013", subrayó.
Plan Nacional de Reformas
En la presentación del Programa de Estabilidad 2012-2015 y del Plan Nacional de Reformas 2012, justificó este aumento de los impuestos al consumo en la necesidad de "dar un salto definitivo desde el punto de vista de la competitividad", a pesar de que no se espera un repunte del consumo privado hasta 2014, que además será muy leve. El ministro dijo que el esfuerzo de consolidación fiscal en 2012 alcanzará los 30.264 millones y en 2013 llegará a 19.604 millones para recortar el déficit público al 5,3% este año y al 3% el próximo ejercicio.
Por otra parte, el Gobierno prevé crear cerca de dos millones de empleos entre 2012 y 2020 por efecto del Plan Nacional de Reformas, que hará crecer a la economía española un punto por año en los próximos ocho ejercicios. En total aportará un crecimiento de 8,6 puntos entre 2012 y 2020, detalló De Guindos. De los dos millones de nuevos empleos previstos de aquí a 2020, 1,7 millones se crearían gracias a la reforma laboral, 96.000 empleos por la reforma financiera, 39.000 vendrían de la directiva de servicios, 71.000 saldrían de la reforma de pensiones y 18.000 de la Ley de Estabilidad, según los cálculos del Ejecutivo.
Sin embargo, en los datos macroeconómicos se contempla que el empleo no comience a subir hasta 2014. Para este año, además, se contempla la destrucción de más de 600.000 puestos de trabajo y una tasa del paro del 24,3 %, prácticamente similar a la de 2014, que será del 24,2 %. Mariano Rajoy, según los datos presentados ayer terminaría la legislatura con un paro cercano al 23 %.
Por otro lado, el Gobierno también anunció que tiene previsto presentar un plan de privatizaciones en las próximas semanas para racionalizar y simplificar los diferentes entes administrativos que puedan tener algún atractivo para el sector privado, también desde el punto de vista inmobiliario.
Cambios en las prejubilaciones
Por otra parte, la ministra de Empleo, Fátima Báñez anunció también que el Consejo de Ministros había aprobado el endurecimiento de las condiciones para prejubilar a los trabajadores de mayor edad y que las empresas con beneficios y con más de cien empleados tuvieran que realizar aportaciones a la Seguridad Social si quieren incluir a personas con más de 50 años en los despidos colectivos, una medida incluida en el plan de lucha contra el fraude laboral y en materia de Seguridad Social que estará en vigor hasta 2013.
Este plan en forma de anteproyecto de ley, según explicó la ministra, contempla también otras medidas, como que los convenios colectivos no puedan fijar una edad de jubilación obligatoria.
También modifica el código penal y tipifica como delito el empleo de "simultáneo de una pluralidad de trabajadores" sin dar de alta en la Seguridad Social.
