Las bolsas europeas volvieron a cerrar ayer en positivo, animadas por la posibilidad de que se lleven a cabo en Europa nuevas medidas para hacer frente a la crisis y a la inestabilidad de los mercados, como la ampliación del Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (FEEF). En una jornada de gran volatilidad, el mercado italiano subió el 3,32% y el de Frankfurt, el 2,87%. El principal selectivo de la Bolsa española, el IBEX 35, se revalorizó el 2,56% y supera los 8.200 puntos y el de París, el CAC-40, el 1,75%.

Los mercados del Viejo Continente comenzaron la sesión bursátil a la baja, con pérdidas de más del 1%, que poco después se convertían en ganancias impulsadas por el sector financiero. Este avance, que en algunos casos llego a alcanzar el 4% como en el caso de la Bolsa italiana, fue motivado por una posible ampliación del Fondo Europeo de Estabilidad Financiera. Pese a conocerse esta noticia, los mercados europeos no conseguían mantener las fuertes ganancias hasta el final de sesión, ya que poco antes se conoció que la Comisión Europea descartaba tomar una decisión sobre el desembolso del sexto tramo de ayuda a Grecia en la próxima reunión del Eurogrupo, que se celebrará el 3 de octubre en Luxemburgo. Por otra parte, el alza registrada ayer por las plazas europeas hace mantener el fuerte rebote del pasado viernes, día en que las especulaciones sobre una posible rebaja de los tipos de interés por parte del BCE hacía registrar ganancias a los mercados de cerca del 1%. En este sentido, el gobernador del Banco Central de Luxemburgo, Yves Mersch, miembro del consejo de gobierno del BCE, dijo ayer que se contempla la posibilidad de una bajada de los tipos de interés en caso de que se ralentice más la economía de la zona del euro. Esta era una de las peticiones que ya había reclamado el Fondo Monetario Internacional.