A pesar de la desastrosa situación en que se encontraba la entidad, con la morosidad disparada y al borde de la intervención, las retribuciones que cobraron los miembros del consejo de administración y de la comisión de control de la CAM se incrementaron en más de un 6% durante el primer semestre del año, según consta en el informe de auditoría realizado por KPMG que ayer se remitió a la Comisión Nacional del Mercado de Valores.

En concreto, los consejeros de la caja alicantina percibieron 794.000 euros frente a los 748.000 del mismo periodo del año anterior. De ellos, sólo 97.000 correspondieron a las dietas por la celebración de consejos de la propia CAM, mientras que los restantes 697.000 euros fueron por la representación de la entidad en los órganos de gobierno de empresas participadas.

Se trata de una partida que se incrementó notablemente con el nombramiento de Modesto Crespo, el primer presidente de la entidad que quiso cobrar una remuneración por su cargo, tal y como avanzó INFORMACIÓN el pasado julio. Crespo cobraba más de 300.000 euros anuales por la asistencia a reuniones de participadas que, en muchas ocasiones, ni siquiera se celebraban. Así, entre enero y junio de 2009, cuando Vicente Sala aún era el máximo responsable de la CAM, esta partida sumaba 505.000 euros. Un año después había ascendido a 652.000 euros y, finalmente, este ejercicio ha llegado a los citados 697.000 euros.

Por su parte, la compensación al resto de consejeros se realizaba mediante su inclusión en los órganos de gobierno de Gesfinmed e Incomed.

Igualmente, el informe constata que a fecha del pasado 30 de junio, tres semanas antes de su cese, consejeros, directivos y sus familiares adeudaban a la CAM hasta 120 millones de euros en créditos blandos y avales, con tipos de interés que iban desde el 0,99% (para aquellos consejeros que además eran trabajadores) hasta el 7,95%. Por si había alguna duda, los nuevos gestores de la caja dejan claro que estas operaciones fueron aprobadas "por el consejo de administración saliente".

Por el contrario, lo que sufrió un importante recorte en el primer semestre del año fueron los sueldos pagados a los directivos, que se redujeron de 1,66 millones a 805.000 euros, debido a la marcha al SIP del exdirector general de la entidad Roberto López Abad y la prejubilación de dos directores generales de área.