La multinacional del aluminio Alcoa ha vuelto a plantear a los trabajadores de la planta alicantina un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) de carácter temporal para los 350 trabajadores que componen la plantilla durante 109 días y con vigencia hasta el próximo año ante el descenso de pedidos registrado por parte de sus principales mercados europeos, según confirmó el presidente del comité de empresa, Marcelino Hernández.

La dirección de la planta y los representantes de los trabajadores volverán a reunirse hoy para avanzar en la negociación. Los sindicatos pretenden "reducir más los días de suspensión de empleo, ya que con la última propuesta puesta sobre la mesa, no firmamos el expediente", añadió Hernández.

El planteamiento de la compañía es que hasta final de este año sean entre 24 o 25 los días de suspensión de empleo, en el que se paralizaría toda la planta, como ya ocurrió en el expediente que se realizó hace dos años. Y para el próximo ejercicio, los días de inactividad -en los que los trabajadores pasan a percibir la prestación del desempleo- se elevarían a 84.

A los trabajadores les ha sorprendido este ERE, "ya que las empresa nos venía diciendo que hasta agosto las ventas iban bien", indicó el presidente del comité de empresa. No obstante, los representantes sindicales admiten que reconocen la situación de la coyuntura internacional y el estancamiento económico o caída de algunos de sus principales mercados como Alemania o Italia.

"Siempre estamos dispuestos a negociar, como lo hicimos con el anterior expediente", añade Hernández. Además, en esta ocasión están comprometidos con ello, dado que la posibilidad de aplicar un ERE por el descenso de pedidos se contempla en convenio laboral firmado este mismo año.

La última fase del anterior convenio no llegó a completarse. Se suspendió antes de lo previsto al reactivarse la demanda.