La esperada reunión entre los representantes de la Unión Europea, el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Central Europeo (BCE), conocidos como la troika, y las autoridadades griegas terminó ayer sin resultados aparentes, por lo que se ha decidido continuarla hoy por la mañana. Del dictamen sobre las reformas y ajustes en Grecia que hagan los supervisores de la UE, el FMI y el BCE, depende que el país obtenga 8.000 millones de euros en las próximas semanas, que resultan imprescindibles para poder pagar salarios públicos y pensiones. En la teleconferencia se analiza la intensidad y la velocidad en la aplicación de las medidas de reducción del déficit a las que Grecia se ha comprometido.

Las horas previas al inicio del contacto de ayer fueron tensas. El responsable de las Finanzas helenas, Evangelos Venizelos, ya había augurado durante el fin de semansa unas jornadas "muy difíciles" para su país y para Europa.

El representante permanente para Grecia del FMI, Bob Traa, instó de buena mañana a Grecia a acelerar la aplicación de las reformas a las que se comprometió ante sus acreedores, especialmente en lo referente a reducir un sector público que calificó de "muy grande". "Grecia ha hecho importantes progresos -dijo- pero se necesitan cambios estructurales fiscales y económicas". También lamentó el retraso del ambicioso programa de privatizaciones de empresas y bienes estatales con el que el Gobierno pretende recaudar 50.000 millones de euros hasta el año 2015. La Unión Europea también reclamó nuevos ajustes. La respuesta griega no se hizo esperar y horas antes de la teleconferencia anunció que el ministerio de Finanzas griego iba a recabar información sobre todas aquellas personas físicas o jurídicas que hubieran sacado depósitos bancarios del país por valor de más de 100.000 euros desde 2009, con el fin de estudiar si esos movimientos aparecen reflejados en sus declaraciones de impuestos.

Para ello, una circular del Gobierno ordenó a todos los bancos e instituciones financieras que presentaran una lista con datos de los depositantes. El Gobierno pretende de esta forma imponer sanciones y tributos sobre aquellos que evadan impuestos en el extranjeros y aumentar los ingresos del Estado.

Los bancos griegos han registrado una sangría constante en los depósitos desde finales de 2009, en el inicio de la crisis de la deuda del país. Muchas personas retiraron fondos en efectivo y los transfirieron a bancos extranjeros, considerados más seguros. Desde enero a junio de 2011 se han retirado de los bancos helenos 21.240 millones de euros, alrededor de un 10% del total. Según estimaciones oficiales, el dinero de los ciudadanos y empresas griegas en el extranjero es de 300.000 millones, una cifra equivalente a la totalidad de la deuda estatal helena en 2010. En cuanto al adelgazamiento del personal de la Administración, los medios griegos cifraban ayer en 100.000 los despidos previstos hasta el añó 2015.

En el actual contexto de crisis de deuda y del acoso de los mercados al euro, la canciller alemana Angela Merkel defendió ayer ante las bases de su partido, la Unión Cristianodemócrata (CDU), el plan de rescate de Grecia y la contribución de su país al mismo. "El euro es más que una moneda", dijo.

consecuencias

La falta de acuerdos lastra las bolsas europeas y vuelve a subir la prima de riesgo

Las dudas sobre el apoyo a Grecia y la posibilidad de que la banca tenga que asumir nuevas recapitalizaciones volvieron a arrastrar ayer a las bolsas europeas. El Ibex 35 selló la jornada con una caída del 1,98 % y se estableció en la cota de los 8.200 puntos, lastrado por la falta de un acuerdo en el Ecofin que permita desbloquear el segundo paquete de ayudas a Grecia y evitar la quiebra del país. Pese al descenso, que pone fin a cuatro días consecutivos de subidas, el parqué madrileño es el que mejor se ha comportado entre las principales plazas europeas, ya que el resto ha registrado pérdidas superiores al 2%. Milán encabezó los "números rojos" (-3,2%), por delante de París (-2,7%), Francfort (-2,5%) y Londres (-2%). Además de no desbloquear el rescate griego, los ministros europeos constataron este fin de semana en Polonia la necesidad de recapitalizar el sistema financiero, lo que ha pesado sobre los valores de la banca. En el mercado de divisas, el euro siguió perdiendo terreno frente al "billete verde", y cerró en 1,3644 dólares. La prima de riesgo también se tensó en Italia hasta los 378 puntos, y en España hasta 355. e. p. madrid