Unos 700 empleados de CAM han solicitado conocer el cálculo de la indemnización que le correspondería para decidir después si se acogen al plan de bajas incentivadas previsto en el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) y que sólo contempla 120 plazas, según confirmaron ayer fuentes de UGT.
La entidad -intervenida desde el pasado 22 de julio- se ha encontrado con una avalancha de peticiones para la simulación de las compensaciones económicas por parte de trabajadores que, en su mayoría, ya se han visto afectados por el cierre de oficinas en las zonas de expansión o de los que se verán en los próximos meses. No obstante, también los hay que la han solicitado "desde las zonas históricas de la caja (Alicante, Murcia y Valencia) y otros para probar y conocer cómo se hacen los cálculos", según confirmaban las mismas fuentesde sindicales.
Esta importante demanda viene a evidenciar la inquietud que existe entre la plantilla de CAM ante el plan de clausuras de sucursales (107 hasta final de año) y el futuro que le espera a la entidad que no es otro que un proceso de subasta, tras el cual la decisión sobre la masa laboral estará en manos del comprador. De ahí que los sindicatos hayan reivindicado al Banco de España y a los administradores del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) -que gestionan CAM desde la nacionalización- que en el cuaderno de venta se incluya el mantenimiento del empleo, así como de la Obra Social. Ambas reivindicaciones se repetirán el próximo lunes, día 5, en la concentración que la plataforma de la unidad sindical ha convocado ante la delegación en Alicante del Banco de España a las 19.30 horas.
La mayoría de las peticiones para las bajas incentivadas proviene de las zonas de expansión de la entidad, sobre todo de Andalucía que es por donde ha comenzado el cierre de oficinas. De hecho, esta autonomía concentró este mes el grueso del adelgazamiento de la red, con 20 clausuras e, igualmente, donde se plantearon los primeros 30 traslados de trabajadores, una situación que está creando mucha inquietud entre los afectados "por los desplazamientos y cambios de residencia a larga distancia a que se ven abocados", apuntaban fuentes de CGT.
Finales de octubre
Aunque el programa no se cerrará hasta el 31 de octubre, las primeras salidas indemnizadas ya se han concretado en Sevilla. "Son seis trabajadores a los que se les planteaba un traslado con cambio de residencia por el cese de actividad de su sucursal y como implicaba la separación familiar, finalmente, han decidido acogerse al plan", aseguraban las mismas fuentes sindicales.
Según las centrales, en este programa "no hay condiciones, sólo que no sean trabajadores prejubilables". El plan se basa en una indemnización de 45 días por año de servicio y a partir de ahí, la caja hace una simulación con un cálculo de la indemnización que le correspondería y es el trabajador quien rechaza o acepta adherirse al programa.
En estos momentos no hay un "plan B" para el caso de que la mayoría de trabajadores que han pedido la información de las indemnizaciones decidiera, finalmente, acogerse al plan de bajas incentivadas, aunque sí existe el criterio de que la prioridad sería para los empleados de las zonas de expansión. En la hoja de ruta del cierre de oficinas, se ha comenzado en Andalucía, "pero después irán sucursales de otras partes de España", según los sindicatos, cuyos representantes desconocen si en el caso de que la demanda supere, finalmente, a la oferta se podrá abrir algún tipo de negociación.
El plan vigente se enmarca en el ERE autorizado por la Autoridad Laboral antes de la intervención y que también contempla un programa de prejubilaciones para trabajadores de más de 55 años, que afectará a 853 empleados. De ellos, casi la mitad ya ha salido en dos tandas y en estas fases se han prejubilados altos directivos, entre ellos el exdirector general Roberto López, con una indemnización de 3,8 millones, según fuentes financieras. La tercera tanda se concretará hoy y afecta a 55 trabajadores.
Al cierre de ambos programas, la plantilla de CAM superará los 6.000 empleados y tras culminar el de oficinas, la entidad contará con una red de 841 sucursales.
CGT pide explicaciones a Sicam, UGT y Csica
La central CGT ha instado a los sindicatos SICAM, UGT y CSICA a que depuren internamente responsabilidades sobre su actuación en el seno del consejo de administración de la CAM, por entender que "han colaborado" en el hundimiento de la entidad alicantina. Los citados sindicatos han formado parte en los últimos años del consejo, de la comisión de control y de los consejos territoriales de la CAM. A juicio de CGT, los tres sindicatos apoyaron siempre los planes de la dirección y de los políticos (PP y PSOE) que controlaban la cúpula de la CAM. EFEalicante
Las cuotas pierden un 6,37% y cierran a un precio de 2,35 euros
Las cuotas participativas de la CAM volvieron a bajar ayer por segunda jornada consecutiva, tras las espectaculares subidas de comienzos de semana. Los títulos se dejaron en el parqué un 6,37% y cerraron a un precio de 2,35 euros la unidad. Desde que el jueves de la pasada semana las cuotas perdieran un 50% de su valor, su cotización ha sufrido continuos desplomes y rebotes. La avalancha de órdenes de venta causaron el primer hundimiento del pasado jueves. Era la reacción de los inversores a la decisión de los administradores del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) -que gestionan la entidad desde la intervención- de suspender la amortización de las cuotas a 4,77 euros, aprobada en el consejo de administración del 21 de julio, un día antes de la nacionalización. La incertidumbre que caló entre los inversores los dos días siguientes se convirtió en confianza a primeros de semana. El pasado martes, los títulos se dispararon un 71%. Después se sucedieron los descensos, aunque más moderados que la semana anterior y es que entre los inversores se confía que la suspensión de la recompra sólo sea temporal. Desde su salida a Bolsa en julio de 2008 las cuotas han perdido un 59,7%, ya que entonces cotizaron a 5,84 euros. R.C.
