La jueza de Nueva York que instruye el caso de presunto intento de violación contra el director gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Dominique Strauss-Kahn, denegó ayer su libertad bajo fianza y fijó para el 20 de mayo su próxima comparecencia ante ese tribunal. El fiscal de Manhattan, Cyrus Vance, anunció que Strauss-Kahn, de 62 años, ha sido acusado de intento de violación y de abuso sexual en primer grado contra una empleada de un hotel neoyorquino, delitos por los que puede ser condenado a 25 años de prisión. Strauss-Kahn fue detenido el pasado sábado en el aeropuerto John F. Kennedy de Nueva York cuando ya estaba a bordo de un avión que le iba a trasladar a París para asistir ayer a una reunión en Bruselas con ministros de la UE sobre la reestructuración de la deuda griega. El político y economista socialista francés, casado y padre de cuatro hijos, fue acusado por una empleada de un lujoso hotel neoyorquino de intento de violación y abuso sexual.

El acusado llegó al tribunal sur de Nueva York esposado y vistiendo el mismo traje oscuro y camisa blanca con que se le pudo ver durante el fin de semana tras ser detenido. La fiscalía de Manhattan informó en un comunicado de que sobre el dirigente del FMI pesan dos acusaciones de agresión sexual en primer grado, otra por intento de violación y otros cargos por abusos sexuales.

En la acusación presentada por la fiscalía de Manhattan se describe que "Strauss-Kahn cerró la puerta de la habitación de su hotel para evitar que su víctima, una empleada de limpieza del establecimiento, pudiera escapar". "Tomó a su víctima por el pecho sin su consentimiento e intentó quitarle la ropa interior, además de que manoseó su área vaginal", agregó el fiscal, quien precisó que Strauss-Kahn "intentó dos veces por la fuerza llevar su pene a la boca de su víctima". Tras denegar la libertad bajo fianza de un millón de dólares solicitada por los abogados del director gerente del FMI, la jueza Jackson ordenó su encarcelamiento.

La fiscalía, al presentar las pruebas forenses que implican supuestamente al político francés, dijo que el acusado tiene otra investigación pendiente por otro escándalo sexual. De hecho, la escritora y periodista Tristane Banon anunció ayer que presentará una denuncia por una agresión sexual en 2002 contra el director gerente del FMI. La joven, que actualmente tiene 31 años, ya reveló la supuesta agresión sexual en un programa de televisión en 2007, pero entonces afirmó no querer presentar una denuncia "para no pasar por la niña que tiene un problema con el político". Banon, que tenía 22 años en el momento de la presunta agresión, afirmó también que su madre le aconsejó que no fuera a la policía.

Respecto al nuevo caso, la Policía de Nueva York ha encontrado arañazos en el cuerpo de Strauss-Kahn, según informaba ayer la página francesa Atlantico.fr. La web se hace eco de una serie de mensajes enviados por diplomáticos franceses a París para informar al Gobierno galo de las circunstancias del arresto del director del FMI y la situación en la que se encontraba. Uno de estos mensajes confirmó que "el interesado niega los hechos que se le imputan". Según este documento, "se han constatado arañazos en el torso del presunto autor" del delito. Los diplomáticos franceses explicaban que Strauss-Kahn "ha dado su beneplácito para que se realicen exámenes complementarios" que se llevaron a cabo el domingo por la tarde, y que según la información publicada por distintos medios, consistieron en la toma de muestras de ADN.

Afirma que comía con su hija

El director del FMI se defendió de las acusaciones afirmando que comía con su hija en el momento en el que supuestamente ésta se produjo, informaron ayer medios franceses. La emisora RMC señala que, conforme a este relato, Strauss-Kahn abandonó el hotel Sofitel de Nueva York en torno a las 12.00 hora local. La empleada del hotel había señalado que la agresión se produjo en la habitación del hotel una hora más tarde, lo que, según los letrados, demuestra que no fue posible, agrega RMC. No obstante, el diario Libération asegura que la Policía estadounidense sitúa ahora los hechos en torno al mediodía y no hacia las 13.00 hora local.

La mujer que denunció a Strauss-Kahn trabajaba en el hotel desde hace tres años y no había habido quejas de ella, según el The New York Post. El diario señaló que se trata de una mujer procedente de África de 32 años, residente en el Bronx, casada y madre de una chica de 16 años. Según sus compañeros de trabajo y conocidos, es una trabajadora incansable.