El presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, se ha mostrado partidario de elevar la edad legal de jubilación en España desde los 65 años actuales a los 67 propuestos por el Gobierno e incluso hasta los 70 años sugeridos por Bruselas, siempre de manera progresiva y por medio de un "plan sensato".

Díaz Ferrán, en una entrevista con Europa Press, defendió la subida de la edad de jubilación como una medida "imprescindible y aconsejable" para garantizar la sostenibilidad a futuro del sistema de pensiones, dada la mayor esperanza de vida de los españoles y las expectativas de que dentro de 30 ó 40 años habrá el triple de pensionistas que en la actualidad.

"Subir la jubilación a los 67 años me parece razonable y una tendencia de llegar a los 70 también me parece razonable con el tiempo. Hay que hacer un plan sensato. Claro que habrá que llegar a los 70, pero a lo mejor dentro de cinco años, de siete o de diez. A lo mejor ahora son 67, luego 68 y después 70, eso es lo lógico", dijo.

La subida de la edad legal de jubilación es una de las medidas que defenderán los empresarios cuando la reforma de la Seguridad Social, ahora en manos de los parlamentarios del Pacto de Toledo, llegue a la negociación entre el Gobierno y los agentes sociales.

Pero hay más. La CEOE, según avanzó su presidente a Europa Press, también pedirá ampliar el periodo de cálculo de la pensión a toda la vida laboral, así como beneficios fiscales "agresivos" para que los ciudadanos se hagan también pensiones privadas, complementarias a las pensiones públicas.

"En el periodo de cálculo de la pensión habrá que tender, como en Europa, a que sea toda la vida de trabajo", subrayó el líder de la patronal, que añadió que aquellos que pierdan con esta medida algo de dinero de su pensión pública podrían compensarlo con una pensión privada, para lo que son necesarios incentivos fiscales "muy atractivos".

En cuanto a la reforma laboral, el presidente de la CEOE insistió en que a los empresarios no les gusta el texto que ha elaborado el Gobierno y que ahora está en el Parlamento en el trámite de enmiendas parciales. Así, Díaz Ferrán se mostró especialmente crítico con los límites que se incluyen para los contratos de obra o servicio, con la penalización de la contratación temporal (la indemnización por fin de contrato subirá progresivamente de ocho a doce días por año).

Para el dirigente empresarial, el límite que se ha puesto en la reforma laboral a los contratos de obra o servicio "no tiene ningún sentido", pues un contrato de obra o servicio debe durar lo que dura la obra o el servicio. "Lo otro es complicar tremendamente las relaciones laborales. Ha sido un paso atrás y no va, para nada, a favor del trabajador", subrayó.

En cuanto a las causas objetivas de los despidos económicos, el presidente de la CEOE pidió "claridad", pues ni antes de la reforma ni en el propio texto de la misma se definen, a su juicio, de manera clara.