El Euríbor no es inmune a las tensiones de tipos de interés del mercado, el referente de más del 90% de las hipotecas ha superado con claridad la cuota del 1,3% en la que llevaba meses oscilando y ya cotiza ligeramente por encima del nivel de agosto de 2009. Aunque la diferencia es ligeramente superior, supone que vuelvan a ser más caras las cuotas a pagar tanto para los que quieran acceder a la vivienda, como a los que ya la están pagando sus cuotas y verán que junto a la subida del IVA el presupuesto familiar vuelve a ser más restrictivo.

Ante este posible cambio de escenario, lo más recomendable es siempre buscar la mejor opción para el que tenga ya una hipoteca y más cuidado para el que decida aprovechar los últimos meses de desgravación por compra de vivienda habitual para todos, con independencia de lo que ganemos cada año.

Para los que busquen una hipoteca para primera vivienda, deben tener muy en cuenta que las cuotas actuales no se parecerán en nada si suben los tipos, este ha sido uno de los problemas que ha hecho más grave la crisis financiera en España, la regla del 30%-35% vale de poco si se contratan hipotecas a largo plazo con unos tipos tan bajos como los actuales por todo ello, el consumidor debe tener en cuenta que debe tener un buen margen si la situación cambia.

Un porcentaje de alrededor del 25% de los ingresos es mucho más apropiado, a esto se puede añadir algunas fórmulas que protejan de subidas, huyendo siempre de productos de riesgo que muchas veces se disfrazan de seguros, como los SWAPS, pero que limitan el pago si sube pero pueden generar grandes perjuicios si bajan. Seguros de desempleo o negociar un techo hipotecario acorde con la realidad es muy buena opción.

Contratar hipotecas con periodos de carencia, en la que sólo se pagan intereses, puede ayudar a pagar menos los primeros años, pero con tipos bajos, si podemos es mejor pagar la cuota íntegramente y así disminuir capital y por tanto pagar finalmente menos cantidad.

Novación o Subrogación para generar hipotecas

Mejorar las condiciones de nuestra hipoteca sólo es posible para quienes tengan una situación financiera saneada y especialmente lo que deban respecto al valor de su vivienda sea un porcentaje lo más bajo posible, lo cual generará mayor seguridad al banco que el 80% tradicional.

Para los que puedan deben fijarse en aspectos esenciales además del tipo de interés inferior, no tener cláusula de suelo o que sea lo más baja posible, e intentar que la entidad financiera asuma la mayor parte de los gastos (tasación, comisión de subrogación, etc.). También que esta bajada de tipos no esté basada en contratar muchos productos que no necesitemos y que suponen un sobrecoste.

Pero la opción más barata es presionar a nuestra entidad a que mejore las condiciones haciendo una novación, sin tener que pasar por el notario y asumir más gastos. Ser un buen cliente y tener una posición de fuerza puede ayudarnos a mejorar nuestra situación financiera.

Antonio Gallardo. Director de Contenidos www.iahorro.com Comparador de hipotecas