Los presidentes de Caja Granada, Cajamurcia, Caixa Penedès y Sa Nostra firmaron ayer en Madrid el contrato por el que las cuatro entidades constituyen el Sistema de Institucional de Protección (SIP), que dará lugar al quinto grupo financiero de cajas por volumen de negocio, al sexto por volumen de activos y al cuarto por número de oficinas.

La firma del contrato en la sede de la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA) se produce después de que los consejos de administración de las cuatro cajas aprobaran el documento de constitución, una vez que la Comisión Ejecutiva del Banco de España aprobase el pasado martes el plan de integración, que contará con una suscripción por parte del FROB de participaciones preferentes convertibles en títulos por valor de 915 millones.

El nuevo grupo financiero, que suma algo más de cuatro millones de clientes, se convierte en el cuarto del sistema de cajas español por fondos propios, con 3.855 millones de euros; el quinto por volumen de negocio, con algo más de 103.433 millones; el quinto por resultados atribuidos, con 228 millones; el sexto por volumen de activos, con 73.055 millones y el cuarto, por número de oficinas, con 1.703.

El nuevo grupo se orientará hacia un modelo de gestión eficiente que permita aprovechar las oportunidades existentes en el mercado, según figura en el contrato. De esta manera, el SIP está inspirado en un modelo de franquicias regionales líderes, que reconoce el valor de preservar la identidad de cada una de las cajas, que mantendrán su personalidad jurídica, su marca, su lealtad territorial y su negocio minorista, así como sus propios órganos de gobierno y su obra social, independientes. En este sentido, las cajas tendrán plena autonomía en la gestión de la respectiva obra social y cultural, aunque en ámbitos clave de negocio y gestión se impulsará una actuación homogénea bajo el paraguas de la sociedad central, que operará con el nombre de "Banco Mare Nostrum".

El consejo de administración del grupo contará con 16 miembros y su presidente ejecutivo será el titular de Cajamurcia, Carlos Egea, mientras que el vicepresidente será Ricard Pagés, director general de Caixa Penedès y el secretario, Antonio Jara, presidente de Caja Granada y máximo responsable de Sa Nostra, Fernando Alzamora, presidirá la comisión de auditoría.

Tras conocer la aprobación del SIP, el presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, afirmó que respeta la decisión de Caja Granada, pero no rechazó que el Gobierno andaluz vete la operación y declaró que no descarta "nada". Asimismo recordó que la Junta todavía no conoce la documentación relativa al SIP, por lo que el Gobierno andaluz "se pronunciará" cuando se le remita en septiembre. Por otra parte, el líder del PP de esa Comunidad, Javier Arenas, pidió ayer a Griñán que "retire de manera inmediata" sus declaraciones sobre el posible veto al SIP de Caja Granada, y que "respete" la decisión de sus órganos.