Durante la última sesión de control del actual periodo de sesiones en las Cortes, el presidente de la Generalitat, Francisco Camps, ofreció datos erróneos sobre el impacto de una eventual alianza entre la CAM y Bancaja, ahora integradas en sendas "fusiones frías" con un conglomerado de entidades entre las que figuran, respectivamente, Cajastur y Bancaja. Camps -desde la tribuna y en respuesta al síndic de Compromís y líder del Bloc, Enric Morera- cifró en 1.500 el número de trabajadores despedidos en el caso de que, finalmente, las dos cajas valencianas, algo que no ha ocurrido, se hubieran avenido.

"Esa fusión habría llevado a la calle a más de 1.500 trabajadores y el 35% de los créditos compartidos se habrían visto menoscabados", lanzó el presidente de la Generalitat en la réplica a Morera. En realidad, el jefe del Consell se quedó corto. Los informes apuntaban a un coste social que hubiera superado los 4.000 trabajadores. Compromís era partidario de una gran fusión de las dos cajas valencianas para mantener los instrumentos de control financiero pero con la sede operativa en Alicante. El presidente de la Generalitat, sin embargo, citó la existencia de informes que desaconsejan una unión entre ellas y ha defendido que ambas han optado por la mejor opción. Contra la tesis de Morera sobre los perjuicios que el camino que han tomado ambas entidades tendrá sobre las empresas, para Camps, por contra, la unión de Bancaja y Caja Madrid así como la de la CAM con Caja Astur, entre otras entidades más pequeñas, favorecerá que, en el futuro, la Comunidad cuente con instrumentos financieros que los valencianos no podían "ni soñar". "Serán más fuertes, más solventes, de más calidad y de más cantidad", aseveró Camps antes de apuntar que las dos cajas "siguen con sus órganos de dirección", que tienen "plena capacidad para decidir el crédito y a quién dárselo". "Seguirán teniendo plena capacidad para tomar decisiones", concluyó el presidente de la Generalitat.

El síndic de Compromís, Enric Morera, acusó a Camps de ser "un traidor a los intereses del pueblo valenciano" y sostuvo que ha "entregado" el control de las cajas de ahorro de la Comunidad a "unos organismos superiores" para lograr el perdón del presidente del PP, Mariano Rajoy, por su implicación en el caso Gürtel.