El Consejo de Ministros aprueba hoy el decreto-ley con la reforma laboral que ha provocado que los sindicatos convoquen la primera huelga general contra el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, que será el próximo 29 de septiembre.

El Ejecutivo cumplirá a pesar de ello su promesa y sacará adelante en esta reunión el denominado Decreto-ley de Medidas Urgentes de Reforma del Mercado Laboral, que entrará en vigor cuando lo dicte el texto, y si es de la forma habitual, un día después de su publicación en el Boletín Oficial del Estado.

Aunque el decreto entre en vigor inmediatamente, la próxima semana se decidirá, con toda probabilidad, su tramitación como proyecto de ley en el Congreso, lo que dará pie a que los partidos negocien con el Gobierno modificaciones y puedan cambiar con sus enmiendas cambien algunos aspectos de esta polémica reforma.

En cualquier caso, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, cumplirá con su objetivo de ir a Bruselas esta tarde a celebrar el último Consejo Europeo de la Presidencia Española con la reforma laboral, que tanto le han pedido las instituciones internacionales.

El líder del PP, Mariano Rajoy, también partirá hacia Bruselas para estar en la cena que organiza el Partido Popular Europeo, en la víspera de la cumbre.

Por otro lado, el Consejo de Ministros tiene previsto aprobar el techo de gasto presupuestario para 2011 y los objetivos de estabilidad presupuestaria -del déficit en que pueden incurrir las administraciones- para el periodo 2011-2013.

El Gobierno da el visto bueno a estas cifras, ya anunciadas, un día después de que el propio Ejecutivo y las comunidades autónomas acordasen los objetivos de estabilidad regionales, trámite previo necesario para la aprobación definitiva de hoy.

Según estudió el Consejo de Ministros del pasado 28 de mayo, el techo de gasto con el que contará el Gobierno en los Presupuestos de 2011 será de 122.256 millones de euros, un 7,7% menos que el presupuesto inicial de este año.

Mientras, en los objetivos de estabilidad se incluye el compromiso con calendario del Gobierno para ir reduciendo el déficit público hasta el 3% del PIB en 2013.