El ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, ha afirmado que espera "poder llegar a un acuerdo" en la última reunión con los agentes sociales para negociar la reforma laboral, aunque ha recordado que de no ser así, el Gobierno aprobará dicha medida el próximo día 16.

"El diálogo social sigue vigente, y mientras haya reuniones, trabajamos con la voluntad de llegar a un acuerdo", dijo el ministro a su llegada al Consejo de Empleo y Asuntos Sociales que se celebra hoy en Luxemburgo.

El ministro precisó no obstante que si el miércoles no hay acuerdo (día en que se celebra la última reunión entre el Gobierno, la patronal CEOE y los sindicatos CCOO y UGT), el Ejecutivo llevará reforma al Parlamento, donde espera contar "con un amplio apoyo".

En cuanto al contrato de fomento del empleo estable, una de las medidas de la reforma laboral que más rechazo han suscitado de los sindicatos, Corbacho recalcó que con ella se pretende "que los contratos fijos puedan ser más atractivos sin perder el derecho a la indemnización", más que "un abaratamiento del despido".

Aligerar el coste de la indemnización

Con este tipo de contratos se busca "una formulación para apostar por un trabajo más estable", al tiempo que se intenta "que al empresario se le aligere el coste de la indemnización", explicó el ministro.

Corbacho recordó que en España "existe actualmente el despido libre", que permite a un empresario despedir a cualquier trabajador "simplemente con indemnizarlo con 45 días".

Además, los contratos de fomento del empleo estable "no dañarían los derechos de los trabajadores que tienen contratos precarios", sino que "les darían la posibilidad de que los nuevos contratos que se les ofrezcan no sean precarios sino más estables", señaló.

Asimismo, Corbacho expresó su "enorme respeto" a la huelga de funcionarios convocada para mañana, y manifestó su deseo de que "se desarrolle en un clima de normalidad".

El ministro comentó que los funcionarios "consideran que la mejor forma de mostrar su desacuerdo con las medidas del Gobierno es una huelga", y añadió que el Ejecutivo "ha adoptado las medidas que cree necesarias para la salida de la crisis".