Hace apenas una semana que se anunció el acuerdo pero ya empiezan a circular las quinielas sobre quién representará a la CAM en el consejo de administración del nuevo banco que se encargará de gestionar el SIP con Cajastur, Caja Cantabria y Caja Extremadura. De los cuatro asientos que le corresponden a la entidad alicantina uno ya está adjudicado al presidente de la caja y futuro presidente del SIP, Modesto Crespo, pero los otros tres todavía están por decidir y su designación será una cuestión delicada. Para empezar, porque los socialistas confían en que se respete el actual reparto de poder en el seno de la CAM y que, por tanto, al menos uno de los sillones sea para algún consejero afín.

Las fuentes consultadas resaltan, además, la conveniencia de esta presencia del PSPV en el consejo del nuevo banco. "El resto de cajas que participan en el SIP son de comunidades donde los socialistas gobiernan o forman parte del gobierno y, al menos de momento, Zapatero sigue siendo el presidente del país", recuerdan las citadas fuentes.

En este sentido, consideran que la mediación de Modesto Crespo puede ser clave. El empresario ilicitano ya convenció el pasado enero al presidente de la Generalitat, Francisco Camps, para que no pasara el "rodillo" en la renovación de los órganos de gobierno de la entidad, como había ocurrido días antes en Bancaja, donde se vetó a los representantes socialistas. También juega a su favor el apoyo que la operación ha recibido del secretario general del PSPV, Jorge Alarte, que ha defendido el SIP con Cajastur frente a los que criticaban el proyecto al considerar que el peso de la caja alicantina no era el adecuado.

Los dos representantes que en estos momentos tienen los socialistas en el consejo de la CAM y, por tanto, susceptibles de resultar elegidos para el SIP son el catedrático de Economía Martín Sevilla y el empresario noveldense Jesús Navarro.

La elección del resto de representantes tampoco parece sencilla. Aunque en principio el protocolo de intenciones suscrito por las cuatro entidades no lo especifica, se da por hecho que los miembros del consejo del SIP procederán de los consejos de administración de las cajas. En el caso de la alicantina, además, el director general de la entidad, Roberto López Abad, que podría haber ocupado uno de los asientos, queda excluido puesto que se encargará también de la dirección general del nuevo banco.

Nombramiento personal

"Los elegidos deben ser personas muy implicadas y en las que confíe la caja porque el nombramiento será a título individual. Es decir, una vez que ocupen el cargo permanecerán todo el mandato con independencia de si cesan en la CAM", apuntaban ayer fuentes del consejo de la entidad. Este podría ser el caso del propio Modesto Crespo, que finaliza su mandato en Caja Mediterráneo dentro de tres años (aunque puede renovarlo) pero será presidente del SIP un mínimo de seis. Por eso, el citado consejero considera que la única opción es que se consensúe una lista entre todos los sectores con representación en la caja para evitar, por ejemplo, que los resultados de las próximas elecciones autonómicas puedan desestabilizar la fusión.

Por otro lado, el sindicato CGT mostró ayer su negativa a que un banco gestione el negocio de las cajas que participan en el SIP. Asimismo rechazan un posible cambio de marca de la entidad y señalan que sólo aceptarán un plan de prejubilaciones si sirve para contratar a nuevo personal.