Era un secreto a voces. Neymar abandona el FC Barcelona para recalar en otro de los grandes equipos de Europa, el Paris Saint-Germain. De esta manera, el jugador brasileño se convierte en el jugador más caro de la historia después de que los parisinos hayan abonado la cláusula de rescisión de 222 millones de euros.

Neymar es uno de esos jugadores especiales, de los que hacen historia. Y precisamente ese es uno de los posibles motivos por los que abandona la ciudad condal. Leo Messi es para muchos el mejor jugador de todos los tiempos y todavía le quedan varios años de fútbol. Por lo que, a pesar de la gran amistad que les une, el brasileño tenía la necesidad de separarse del argentino para lograr una de las grandes metas de cualquier futbolista: el Balón de Oro.

De la escuela brasileña, Neymar es pura magia. Disfruta con el balón y, lo que es mejor, hace disfrutar al resto. Darle la pelota al ya exjugador del Barcelona es sinónimo de espectáculo. Con una gran conducción de balón y capacidad regateadora, es simplemente explosivo. Además, en sus años como 'culé' ha mejorado en su faceta goleadora, anotando un total de 105 goles en 186 partidos oficiales. Pero también es un gran asistente, desde su llegada a 'can Barça' en 2013, ha 'regalado' 80 goles.

Acusado alguna que otra vez por sus 'excesivos recursos futbolísticos' en ciertos momentos del partido, sus defensores le han respaldado argumentando que 'él entiende el fútbol así'. Genio y figura, no deja indiferente a nadie y ahora será el Parque de los Principes de París quién baile al son de la samba del capitán de la selección brasileña.