El brasileño Marcelo Vieira, autor del tercer tanto del Real Madrid ante el Eibar en el minuto 37, celebró éste apoyando la rodilla izquierda en el césped y levantando el puño al cielo, un gesto de protesta contra el racismo de nuevo de actualidad tras el fallecimiento del afroamericano George Floyd, asfixiado por un policía en Mineápolis el pasado 25 de mayo.

El tanto lo marcó Marcelo con un buen disparo tras hacerse con un rechace en la frontal del área.

El gesto de hincar la rodilla en el suelo se convirtió en un símbolo en la lucha contra la discriminación racial desde que el jugador de fútbol americano Colin Kaepernick, 'quarterback' de los San Francisco 49ers en la SuperBowl de 2013 -que perdieron contra los Baltimore Ravens- lo realizase en 2016 durante la interpretación del himno nacional de Estados Unidos como protesta por la violencia policial ante los ciudadanos de raza negra.