El Alcoyano puede ser el gran beneficiado si prospera la tesis mayoritaria de que suba a Segunda B el primer clasificado. Con todo, su presidente Juan Serrano mira más allá y alerta sobre el descalabro que puede suponer para los clubes la pérdida de ingresos previstos este curso y las dificultades en todos los órdenes para afrontar la próxima temporada.
P ¿Cómo afronta un histórico como el Alcoyano un parón como éste sin precedentes y sin previo aviso?
R Somos un club modesto y el escenario es muy complicado para todos; para grandes y pequeños, en todos los ámbitos. Estábamos muy ilusionados esta temporada por disputar un «play-off» y la recaudación de ingresos que supone; por devolver la sonrisa y la ilusión a la gente de Alcoy por un posible ascenso y esto te lo rompe todo. Nos han cortado la vida por la raíz.
P El presente es muy duro y el futuro está lleno de incógnitas para el fútbol en general y para el modesto aún más...
R Para más inri, el día después. ¿Qué va a pasar con todos los deportes? ¿Qué pasará con posibles espónsors, con los ayuntamientos y con la masa social, el 80 por ciento de la cual son personas mayores con riesgo máximo? El panorama que nos espera es muy complicado hasta que no tengamos la vacuna. Hasta ese momento vamos a salir con mucho miedo a la calle; yo tengo a mis padres confinados en su casa con 80 y 75 años. Mi padre tiene asma y si pilla el bicho dura 20 minutos.
P ¿Qué escenario contempla como el más factible para los próximos meses?
R Yo hubiera dejado la competición conforme está, a falta de 10 jornadas, para reanudarla el 14 de marzo del año próximo ya con la vacuna y todas las garantías. Aunque es muy difícil mantener las mismas plantillas. Va a ser muy complicado recomenzar la temporada. No sé qué pasará con la campaña de socios y demás asuntos.
