El plan de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) que preside Luis Rubiales de dar por acabada la temporada en el fútbol no profesional sin descensos y con «play-off» por el ascenso a partido único ha convencido, aunque con matices, a los cuatro clubes de la provincia directamente afectados por la propuesta. El Hércules y el Orihuela, que ocupan plaza de descenso en el grupo III de Segunda B, serían los principales beneficiarios y respaldan sin fisuras el «plan Rubiales». En Tercera División, el Intercity también la defiende -mientras espera la resolución de un recurso del Villarreal B para saber si puede disputar la eliminatoria por el ascenso como cuarto clasificado-, en tanto que el Alcoyano, líder destacado del grupo V, respalda que no haya descensos de categoría, pero defiende que se ha ganado el derecho a subir directamente a la categoría de bronce tras su «magnífica» temporada.
Los tres clubes alicantinos de Segunda B -incluido La Nucía, que no se ve directamente afectada, pero que sí es partidario de que haya descensos- y los siete del grupo VI de Tercera (Eldense, Jove Español, Ilicitano, Crevillente y Novelda) participaron ayer en una reunión telemática con el presidente de la Federación de Fútbol de la Comunitat Valenciana, Salvador Gomar, para debatir la propuesta de la RFEF, que afecta a todo el fútbol no profesional, de Segunda B hacia abajo, así como a las Ligas de ámbito estatal del fútbol femenino y fútbol sala y en todas las estatales de la categoría juvenil.
Tras esta primera toma de contacto y debate, los clubes de la Comunidad están citados mañana por la tarde para una votación consultiva de este plan, cuyo resultado se remitirá a la Federación Española. Fuentes del organismo autonómico y de los clubes consultadas ayer dieron por hecho que la propuesta de Rubiales recibirá un respaldo mayoritario «porque en una situación excepcional como la que vive toda la sociedad con el coronavirus se busca una solución que cause el menor mal posible y es inviable contentar a todo el mundo».
De los 27 clubes valencianos citados a la reunión -los siete de Segunda B y los 20 de Tercera- una amplia mayoría está a favor de dar el visto bueno al «plan Rubiales», que contempla para la próxima temporada una Segunda B con 98 equipos -los 18 que subirían de Tercera y ningún descenso- y la posibilidad de crear un quinto grupo.
Las mayores reticencias las plantearon el Castellón y el Alcoyano, líderes destacados de Segunda B y Tercera, que son partidarios de un ascenso directo que premie sus buenas campañas, así como el Saguntino, séptimo del grupo VI, que habría pedido junto a otros clubes que los «play-off» por el ascenso se amplíen a los ocho primeros clasificados y no sólo del primero al cuarto.
«¿Quién nos dice que vamos a jugar un play-off y cuándo lo podremos disputar si los contratos de los jugadores se cumplen el 30 de junio?», se preguntó el presidente del Alcoyano, Juan Serrano. «Nosotros no somos de Primera, ni Segunda; no tenemos medios, ni nos podemos confinar, ni tenemos acceso a los test del coronavirus».
Serrano, que considera «electoral» la propuesta de la RFEF «para intentar quedar bien con todos», aboga por que la temporada se dé ya por acabada y que suban los primeros clasificados sin disputar play-off, del que se cambia el sistema tradicional. «Que se acabe todo y podamos vivir tranquilos porque esto es insufrible entre comunicados de la AFE y la Federación», recalca. El presidente alcoyanista propone que se marque una fecha por las autoridades sanitarias para retomar la Liga suspendida hace un mes y si resulta inviable su reanudación en ese momento, que asciendan los primeros clasificados.
Por su parte, el presidente del Intercity Sant Joan, Salvador Martí, respaldó la propuesta de la RFEF, aunque no comparte que los «play-off» por el ascenso se disputen entre los cuatro equipos del mismo grupo «porque sólo se le daría la opción real de subir a un equipo de la Comunidad, al no enfrentarse a otros territorios».
El Intercity es quinto en la tabla, por detrás del Villarreal C, y jugaría ese «play-off» como cuarto siempre y cuando no prospere el recurso del primer filial amarillo contra la resolución que le dio por perdido su partido en Castellón por alineación indebida. En caso de luz verde a la reclamación, los dos filiales disputarían el play-off y se quedarían fuera el Castellón y el equipo de Sant Joan.
Mientras, en Segunda B, el presidente del Orihuela Antonio Felices, reconoció a Efe «el alivio» que supone para su club la propuesta de la RFEF que le salva del descenso, al tiempo que confió en que sirva como «una oportunidad para hacer mejor las cosas la próxima temporada. El conjunto de la Vega Baja es colista, a cuatro puntos de la permanencia.
A su vez, el presidente del Hércules Quique Hernández, partidario de que se pudiera acabar la Liga en los terrenos de juego, volvió a dar prioridad a la resolución de la crisis sanitaria y reconoció que los plazos se estrechan cada vez más, por lo que consideró «inviable» que se reanude la competición y se tomó con «cautela» la propuesta de la Federación.
La Nucía apoya los descensos para que no haya más equipos por grupo
El directivo de La Nucía Bernabé Cano, a la sazón alcalde del municipio y diputado provincial de Deportes, fue el único dirigente alicantino que defendió ayer ante la Federación de Fútbol de la Comunitat Valenciana que sí haya descensos esta temporada, en contra de la propuesta formulada por la RFEF. «Defender los descensos es para que la próxima temporada los grupos se mantengan con el mismo número de equipos porque aumentarlo es un inconveniente económico para la competición», indicó Cano, que precisó que opinaba como directivo de La Nucía y no como alcalde ni diputado. «Cuantos más equipos haya de la provincia de Alicante en Segunda B, mejor para todos».
