Ivan Pastor (Santa Pola, 18 de febrero, 1980) ha visto cómo el sueño de intentar llegar a los Juegos Olímpicos de Tokio y convertirse, con cinco, en el deportista alicantino con más olimpiadas, superando a Isabel Fernández (4), se ha retrasado un año debido a la crisis sanitaria del coronavirus.
El windsurfista santapolero estuvo en Atenas 2004, Pekín 2008, Londres 2012 y Río de Janeiro 2016 y tiene serias posibilidades de estar en la cita japonesa después de que en el último mundial de Dinamarca obtuviera una plaza para España, aunque queda dilucidar quién será su representante. Pastor comparte la decisión de retrasar a 2021 los Juegos de Tokio. «Ha sido lo más acertado porque lo que premia en estos momentos, por encima del deporte, es salvar las vida de las personas».
El regatista de Santa Pola, a pesar de sus 40 años recién cumplidos, no renuncia a seguir en activo, incluso no descarta llegar a los Juegos de París 2024. «Llevo muchos años encima de la tabla. Tokio serían mis quintos juegos. ¿París 2024?, depende de cómo me vea. Lo más importante es la salud y que no haya lesiones y, luego, contar con la ayuda de patrocinadores. El dinero en un deporte minoritario como el nuestro es muy importante y también hay que tener en cuenta la motivación. Si se dan esos ingredientes no tendría problemas en continuar hasta París».
A Iván Pastor, que está parte del año compitiendo por todo el mundo, le ha pillado la crisis del Covid-19 en Santa Pola. «Afortunadamente estoy en mi casa, encerrado y pasando este tiempo lo mejor posible. A finales de marzo tenía el Trofeo Reina Sofía en Palma de Mallorca, que era la competición de vela más importante del calendario internacional y del circuito olímpico en España y también ha sido suspendida. Era el último selectivo para decidir la clasificación para Tokio. Cuando pase todo este periodo tendrán que poner una o dos pruebas más en el calendario».
El mayor problema que tiene el windsurfista santapolero es no poder estar en contacto con el agua para entrenar. «No puedo hacer nada en el agua. Tengo un rodillo en casa, hago remoergómetro, que es lo que solemos hacemos la gente de la vela cuando hay poco viento, pesas y gimnasia. Tengo una casa pequeña y hay que pasar este tiempo lo mejor que se pueda»
Cambio de RS:X a IQfoil
Para Pastor, el aplazamientos de los Juegos de Tokio para 2021 «va a ser un lío» porque para el año que viene «está previsto el cambio de la modalidad RS:X, que es la mía, a IQfoil, que es una nueva especialidad con una tabla más larga que sale volando del agua y es más espectacular. Casi toda la vela iba a cambiar a este tipo porque es más rápida y más vistosa que la tabla de windsurf. Todo iba a cambiar a final de año y de cara a los próximos Juegos de París 2024. Incluso había otros deportistas que no se habían clasificado para Tokio y ya estaban entrenando esta nueva modalidad. En enero de 2021 comenzaba el calendario oficial. Ahora, al retrasar Tokio, es un lío porque hay dos modalidades de windsurf y no sabemos qué va a ocurrir con el calendario. Con los Juegos de Tokio en 2021 quedan pocas pruebas, aunque supongo que, al retrasarlos pondrán alguna más».
El santapolero asegura que «me duele hasta la cabeza hasta de pensarlo. Quedan un par de competiciones muy importantes. En mayo era el Campeonato de Europa y también se ha aplazado. No sabemos si será en agosto o en septiembre al año que viene. Estamos en la curva ascendente del coronavirus y tenemos que esperar a ver cuándo los gobiernos nos permiten salir a la calle sin riesgos de contagiarnos, porque ahora puede parecer que está controlada, pero puede volver a pasar. No sabemos cuánto tiempo vamos a tener que seguir en casa y cuándo podremos volver a entrenar», comenta resignado.
