Nadie sabe cuándo regresará la vida normal para el fútbol, pero lo que sí tiene claro la FIFA es que las competiciones se acabarán de una forma u otra. Hay mucho dinero en juego y el máximo organismo del fútbol mundial no está dispuesto a que la crisis del coronavirus haga un agujero mayor en la economía de los clubes. Así, los contratos se prolongarán más allá del 30 de junio si fuera necesario.

La temporada 2019-2020 no terminará en principio de esta forma el 30 de junio tras la reunión telemática de la FIFA para buscar medidas ante los perjuicios que ha generado la crisis del coronavirus. En este sentido, la FIFA extiende la ventana del 30 junio y los campeonatos nacionales tendrían carta blanca para poder jugar en verano durante los meses de junio y julio.

De esta manera habría una pretemporada de 10-15 días antes de retomar la competición doméstica y la siguiente temporada (2020-21) empezaría con menos fechas FIFA, con fútbol en Navidad y con más jornadas entre semana, pudiendo comenzar en septiembre.

Jaume Roures, responsable de Mediapro y propietario de los derechos televisivos de las grandes ligas y competiciones europeas y mundiales, está también muy pendiente de la evolución de la pandemia del coronavirus. La paralización de las competiciones ya está suponiendo una grave crisis económica, que puede agravarse si no se reanudan. Roures, no obstante, es optimista y en este sentido manifestó y en declaraciones al programa 'No ho diguis a ningú' de RAC1 señaló que «los únicos calendarios viables son los que llevan a terminar más allá de junio. Esto no debe ser un problema, es una situación de fuerza mayor. Si los contratos no terminan, los futbolistas no cobran. Serán los primeros interesados en terminar cuando sea».

«Lo más importante es acabar la temporada. No es tan importante saber cuándo empezará la próxima temporada. Si no se acaba esta temporada, se perderá el 30% de los ingresos, el fútbol europeo perdería más de 7.000 millones de euros. El fútbol no se lo puede permitir», añadió el responsable máximo de Mediapro.

«Si no se acaba alguna competición, se deberá renegociar el contrato y aplicar la proporcionalidad de lo jugado y lo que no. Pero este es el escenario menos posible, todo el mundo está interesante en que termine la temporada», insistió Jaume Roures.

LaLiga y la AFE ya se han puesto manos a la obra para contemplar diversos escenario para la vuelta al fútbol, ya que tienen claro que la competición hay que acabarla. La Liga se podría alargar hasta agosto e incluso septiembre. Al no haber Eurocopa, este escenario es factible y obligaría a reagrupar la siguiente temporada, pero no se perderían los contratos de la actual y sería más sensato encontrar una manera de ponerse de acuerdo para organizar la siguiente con el tiempo que restase. La próxima temporada se jugaría incluso en Navidad y muchos partidos estarían obligados a hacerlo entre semana para dar cabida a todas las jornadas de la competición.

Incluso también se ha puesto sobre la mesa la posibilidad de arrancar en septiembre en un escenario muy pesimista, Volver a jugar en septiembre, lo que obligaría también a modificar radicalmente la temporada 2020-21, pero mitiga las pérdidas de la actual temporada. Lo que queda claro es que el presente curso se finalizará sí o sí. Esto quiere decir que, independientemente de que el momento del regreso de las competiciones llegue unas semanas más pronto o más tarde, se adaptará el calendario para que, en cualquiera de los casos, se disputen los encuentros de las competiciones que habían sido previamente programados aunque con ello sea necesario jugar en pleno verano. La excepción en este sentido estaría, como es lógico, en la no disputa de aquellas competiciones que ya fueron pospuestas como la Eurocopa.

Barcelona, Atlético y Espanyol anuncian un ERTE a sus plantillas

Los tres clubes son los primeros de LaLiga Santander en recurrir al expediente para minimizar gastos

ERTE en los equipos de Primera División. Barcelona, Espanyol y Atlético han sido los primeros en aplicarlo. El Barça ha anunciado un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) para jugadores de las diferentes plantillas, así como para el resto del personal no deportivo, según ha decidido la junta directiva en la reunión mantenida de forma telemática para «minimizar el impacto económico que la crisis del coronavirus está provocando en la actividad» del club culé.

Por su parte, el Atlético de Madrid anunció también que va a solicitar un ERTE que afectará a jugadores, técnicos y empleados, pero que intentará «minimizar el impacto de la medida y limitarlo a lo estrictamente imprescindible». El club rojiblanco reveló la medida, provocada por la emergencia sanitaria del coronavirus que ha obligado a suspender la competición, con una carta de su consejero delegado, Miguel Ángel Gil Marín, en la que explica que es una «decisión difícil» que toman «con el único objetivo de garantizar la supervivencia del club». «Desgraciadamente, y con el único objetivo de garantizar la supervivencia del club, nos vemos obligados a solicitar un Expediente de Regulación Temporal de Empleo para aquellos profesionales que, debido al estado de alarma declarado en nuestro país, no puedan desarrollar su trabajo al haber cesado por completo su actividad, así como para aquellos a los que su jornada laboral se ha visto reducida de manera relevante», indica Gil Marín. Además, el Espanyol ha presentado a las autoridades laborales un ERTE de reducción de jornada del 70 por ciento que afecta a los jugadores, primeros y segundos técnicos y preparadores físicos del primer equipo masculino y femenino, Espanyol B y Juveniles A y B. Además, por solidaridad, la dirección deportiva y la dirección general también se han rebajado el sueldo anual. Los futbolistas del primer equipo, tal como informa el comunicado, mostraron su "voluntad y predisposición para llegar a un acuerdo amistoso con el club".

"La plantilla ha expresado su compromiso con la entidad apelando a su responsabilidad y colocando por delante de todo, el futuro de la entidad", añade el Espanyol. Además, por solidaridad, la dirección deportiva y la dirección general también se han rebajado el sueldo anual de una forma equivalente a la pérdida anual de los afectados por el ERTE.