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«El pánico y la psicosis por el coronavirus no están justificados»

El alicantino Arturo Ruiz, seleccionador de Italia de bádminton, entrena en el Ferrándiz al número 1 italiano tras prohibirle Jamaica al jugador viajar y competir en un campeonato por temor al contagio

El alicantino Arturo Ruiz, seleccionador de Italia, y el número uno italiano, Fabio Caponio, ayer en el Pabellón Pedro Ferrándiz. héctor fuentes

El alicantino Arturo Ruiz, director técnico de la Federación Italiana de Bádminton y seleccionador de aquel país, no sale de su asombro por «el pánico y la psicosis» generados en buena parte del mundo del deporte a raíz del brote de coronavirus detectado en el norte del país transalpino, entre otras zonas. Afincado en Milán desde 2013, pero con múltiples vínculos personales y familiares en Alicante, Arturo Ruiz se ha visto obligado a prolongar su estancia en su ciudad junto al número uno del bádminton italiano, Fabio Caponio, de 20 años, porque al jugador no le han permitido entrar esta semana en Jamaica para competir en el torneo internacional en el que debía buscar los pocos puntos que le faltan para acudir a los Juegos de Tokio.

El miedo a un posible contagio del coronavirus no solo le ha impedido viajar al jugador italiano, sino que aquí en España también se han encontrado alguna reticencia a la hora del contacto para el saludo personal y problemas para poder entrenarse en alguna ciudad. No es el caso de Alicante, donde Arturo y Fabio siguen preparando estos días en el Pabellón Pedro Ferrándiz el calendario internacional de pruebas que aún les quedan hasta el 1 de mayo para colarse entre las 38 mejores raquetas del mundo que competirán por las medallas olímpicas en Tokio el próximo verano. Actualmente es el 45º del ránking y ambos confían en que este parón no le distraiga, ni le perjudique en su objetivo. «Es lógico que se tomen medidas de prevención, pero todo esto se está magnificando», apunta Arturo Ruiz.

Para no perder la forma en estos días inciertos, se entrenan en sesiones de mañana y tarde con jugadores del Club de Bádminton Alicante, a la espera de que se avance en el control del virus y se diluyan los miedos al contagio de cara a las próximas citas que tienen previstas en la República Checa, Cuba, Francia, Canadá, Holanda y Perú. «Es una tontería como una casa», explicaba ayer Ruiz, «que no le dejen entrar a Fabio porque tiene pasaporte italiano y a mí sí por ser español cuando hay mucha gente que hemos estado yendo y viniendo entre ambos países en las últimas semanas».El seleccionador de Italia, nacido en Alicante hace 46 años, explica que cuando hace 10 días se detectó el brote de coronavirus en el norte del país transalpino se tomaron «estrictas» medidas de prevención por parte de la Federación de Bádminton: se suspendió el campeonato de Milán, se cerró y desinfectó el pabellón y se hizo un seguimiento, uno por uno, de los jugadores. «Aún así, no nos dejan competir en el extranjero», lamenta.

Además, el caso del jugador Fabio Caponio es «más sangrante aún» porque él no estaba en Milán, sino que llevaba 14 días fuera compitiendo en Kenia y Uganda. Para prolongar el alejamiento de su Puglia natal y de la zona conflictiva, Arturo decidió que Caponio se quedara con él en Alicante desde el pasado domingo para demostrar en los próximos torneos que lleva el suficiente tiempo fuera del norte de Italia como para estar lejos del alcance del virus.

De momento ya han perdido la opción de sumar puntos olímpicos en Jamaica, además de los dos billetes trasatlánticos de avión de ida y vuelta. «¿Y qué pasa con todo el dinero invertido para tratar de llegar a los Juegos?», se pregunta Arturo Ruiz. El coste de la carrera olímpica de Caponio ronda los 50.000 euros al año y la Federación Italiana ya ha presentado una queja y reclamación de daños por escrito a la Internacional.

Pese a la adversidad, el jugador se muestra sereno y confiado antes del entrenamiento. «Es triste no poder conseguir un buen resultado en Jamaica, pero debo seguir positivo y motivado para lograr el objetivo, aunque tenga que hacer este sacrificio», indicó. «Entiendo las políticas de precaución para evitar el contagio, pero no es realista y sí un agravio comparativo que jugadores españoles o de otras nacionalidades sí puedan entrar a Jamaica y a otros países con total libertad y yo no», añadió el número uno de Italia, bloqueado en Alicante.

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