El Orihuela busca hoy (12 horas) en la Ciudad Deportiva de Buñol, frente al Atlético Levante, un resultado positivo que le permita coger oxígeno para afrontar con los resta de temporada con opciones de conseguir la permanencia en la categoría de bronce.

A pesar de la mejoría mostrada durante el mes de enero, la derrota en Los Arcos del pasado domingo frente al Villarreal B ha dejado al conjunto escorpión de nuevo en el último puesto de la clasificación, con 17 puntos. La plaza de promoción de permanencia, que ocupa el Valencia Mestalla, está a cuatro puntos y la salvación directa, que marca el Nàstic de Tarragona, a seis. Por lo que no es una utopía con 16 jornadas de Liga todavía por delante. El filial granota ocupa el décimo segundo puesto, con 28 puntos.

Para el choque de este mediodía en tierras valencianas, Gerard Albadalejo puede contar con la cinco incorporaciones del mercado de invierno: el portero Marcos Morales, el central holandés Mees de Wit, que ya estuvo en el banquillo contra el Villarreal B; el lateral Víctor Olmedo, el extremo Juanan y el último fichaje, el delantero Pablo Pallarés, con el que el club oriolano cerró un acuerdo el pasado viernes, último día de la ventana de enero. Algunos de ellos tienen bastantes posibilidades de debutar hoy frente al Atlético Levante, incluso estar en el once inicial.

El defensa Ismael Urzáiz, ya está recuperado después de un largo periodo de tiempo lesionado, mientras que el delantero Antonio continúa en el dique seco.

Buena imagen a domicilio

El Orihuela quiere jugar la baza de la buena cara que ha mostrado en muchos partidos fuera de casa en la presente temporada, a pesar de no conseguir en la mayoría de ocasiones resultados positivos. Gerard Albadalejo no quiere pensar más allá del choque ante el filial levantinista porque, como comentó tras el encuentro contra el filial del Villarreal, no les va a servir de nada y todo lo que no sea ir partido a partido puede mermar la moral de la plantilla.

El Atlético Levante afronta el choque después de su victoria la pasada jornada en el Rico Pérez de Alicante. Aún así, los valencianos necesitan seguir sumando para alejarse de los puestos peligrosos de la clasificación. La confianza de medirse al colista puede ser la mejor baza de los escorpiones.