Aprendió a jugar al ajedrez cuando solo contaba con seis años. Su primer contacto con este deporte fue en una plaza de Buenos Aires que frecuentaba diariamente. Allí se reunía un grupo de jubilados que pasaba las horas jugando al ajedrez. Luis María Campos no quitaba los ojos de aquellos tableros llenos de figuras blancas y negras. Le llamaba la atención que cada una se movía de una manera diferente, pero no se quedaba con la duda, preguntaba constantemente y así fue como poco a poco fue aprendiendo un deporte que le apasiona y del que ha hecho su modo de vida. Hoy, con 52 años y con el título de maestro internacional en su poder desde 1991 (un año después de instalarse en Alicante), sigue amenazando con jaque mate a cada contrincante que se le pone delante. Desde 2017 lleva sin perder ni una sola partida y acaba de proclamarse por segundo año consecutivo campeón de España senior (categoría de más de 50 años). Campos se considera un alicantino más y se dedica a dar clases de ajedrez . Es sin duda una eminencia de este deporte y reconoce que desde que estalló la crisis, el ajedrez ha perdido adeptos porque «ya no se reparten los premios que había antes». Con sus dos títulos nacionales bajo el brazo, Campos se marca como gran objetivo el torneo para Grandes Maestros que se disputará en julio en Buenos Aires. Allí se medirá con los mejores especialistas del mundo.

El jugador alicantino dio un giro recientemente en su trayectoria ajedrecística. Abandonó el Enric Valor que él mismo fundó y en el que llevaba 25 años para fichar por el Alfaz del Pi. «Estoy encantado, me han dado todo tipo de facilidades y además me hago cargo de las Escuelas Municipales, es una nueva etapa en mi vida», señaló el maestro internacional. El campeonato de España tuvo lugar en Calpe y allí Campos no tuvo problemas para revalidar su título nacional en una competición que acogió a más de 130 jugadores. Se proclamó campeón invicto con 7,5 de 9 posibles.

«La partida fue muy entretenida ya de salida mostrando la intención de ambos que íbamos por la victoria cosa que pude contener de forma afortunada y conseguir ventaja y al final decidí hacer tablas porque con la ventaja obtenida ya era casi campeón a falta de una jornada», recuerda Campos de su enfrentamiento ante Héctor Elissalt. «En la última jornada ya las matemáticas hacían que ni perdiendo ponga en peligro la victoria final. En la nueve tablas rápidas con Fancisco Trobat y gracias a Dios he vuelto a conseguir el título de campeón de España sénior», añade el alicantino.

«En la madurez parece que estoy jugando mejor y estoy disfrutando más», bromea el jugador de origen argentino sosteniendo la copa conseguida en los salones del hotel Ifach de Calpe.

En el horizonte, Campos tiene la cita de Buenos Aires como gran objetivo, pero antes debe hacer frente a otros compromisos igualmente «ilusionantes» para él como una competición de simultáneas en El Corte Inglés donde los aficionados podrán medirse con él en busca de sorprenderle. «Mi vida gira en torno al ajedrez. Son muchos años si parar de jugar y de estudiar y quiero seguir marcándome nuevas metas», afirma el maestro internacional, que además posee el título de entrenador nacional. Actualmente tiene dos títulos de campeón de España que pudieron ser tres, ya que rozó el primer puesto nacional años atrás.

«Aprendí a jugar al ajedrez de pequeño por intuición y me he convertido en campeón de España», señala Luis María Campos.