Domingo Grau ha dimitido como director deportivo del Orihuela y este mismo lunes se ha despedido de la plantilla. Se convierte así en el segundo miembro del cuerpo técnico en salir del club de la Vega Baja tras la destitución del entrenador, Miguel Ángel Villafaina, en la noche del domingo.

La derrota como local del equipo amarillo ante el Cornellà (1-2), rival directo en la lucha por la permanencia, precipitó los acontecimientos y agitó los cimientos de la estabilidad del Orihuela, ya amenazados desde hacía tiempo por la mala racha de resultados que le han llevado a ocupar la penúltima posición a cuatro puntos por debajo de la permanencia después de disputarse la undécima jornada de liga.

La destitución de Villafaina ha desembocado también en la marcha, en este caso voluntaria, de Domingo Grau. Como director deportivo, fue el encargado de diseñar la plantilla para esta temporada, y los resultados no están siendo positivos.

Esa realidad, unida a la de su apoyo a Villafaina, del que considera un buen entrenador y válido para continuar en el cargo, le ha llevado a presentar su dimisión de un puesto en el organigrama técnico del que se hará cargo a partir de ahora Luis Terrés, el hijo del vicepresidente primero del club.

Domingo Grau llegó al Orihuela el 5 de enero de 2018 procedente del Elche, en el que estuvo seis temporadas, en las que fue entrenador del juvenil en División de Honor, ejerció como director de metodología y coordinador de fútbol 11 y dirigió el fúbtol gase ilicitano durante las tres campañas anteriores.

Casi dos años después, el santapolero abandona la disciplina oriolana en medio de una grave crisis deportiva e institucional del club amarillo.