En 1817, Ludwig van Beethoven recibió de la Sociedad Filarmónica de Londres el encargo de componer una nueva sinfonía. La misma se estrenaría siete años después, el 7 de mayo de 1824, en Viena. El eco de su éxito llega hasta nuestros días. Dos siglos después, durante el verano de 2019, Vicente Parras recibió otro encargo muy diferente. El Alcoyano había caído al «infierno» de Tercera División y necesitaba un director de orquesta para recuperar la ilusión de una afición demasiado acostumbrada a sufrir en los últimos tiempos.
Poco a poco, el trabajo ha ido dando sus frutos. La música de las victorias acompaña hasta ahora al conjunto de El Collao durante esta temporada. Una. Dos. Tres. Así, de momento, hasta nueve. Las mismas sinfonías que compuso Beethoven, uno de los mayores genios de la historia.
La novena sinfonía del Alcoyano llegó el fin de semana pasado, con un contundente triunfo por 4-0 frente al Acero. Antes habían ido cayendo, en orden cronológico Benigànim (1-3), Recambios Colón (1-0), Atlético Saguntino (1-0), Atzeneta (0-1), Roda (4-0), Vilamarxant (1-2), Paterna (1-0) y Novelda (0-2). Tras la goleada, las redes sociales empezaron a echar humo. El Alcoyano era trending topic. ¿Por qué? Tras los pinchazos de Linares Deportivo y Poblense, los alicantinos son el único equipo de categoría nacional en España que cuenta todos sus partidos de Liga esta temporada por victorias.
En Alcoy son conscientes de que están haciendo historia. «Nos llegan los datos y, sobre todo, noto que cada semana vamos recuperando la ilusión de la afición, que llevaba un par de años sufriendo», reconoce Vicente Parras, el entrenador de este equipo en racha. «No nos fijamos un listón de partidos seguidos ganando. La ilusión por todo lo que supone el récord se la dejamos a la afición. Nosotros vamos partido a partido», añade un técnico que insiste en emplear la palabra «ilusión» repetidamente en su vocabulario, fruto no solo de lo mal que lo pasaron sus ahora aficionados el curso pasado sino también él, tras una experiencia negativa en el Ontinyent, con impagos y exclusión de la competición en plena Liga.
Toda gran racha tiene su inicio, su desarrollo y su fin. El Alcoyano está en el segundo paso y no todo ha sido un camino de rosas. «El día que más cerca vi peligrar la racha fue contra el Paterna, en casa. Fallamos un penalti en el minuto 80, marcamos el 1-0 en el 84 y José Juan paró otro penalti en el descuento. Ante el Atzeneta también ganamos con un gol en la última jugada del partido», recuerda Parras. ¿Y cómo motiva a unos jugadores que actualmente tienen nueve puntos de ventaja con el segundo y que se tendrán que jugar el ascenso dentro de muchos meses en una eliminatoria a ida y vuelta? «Insisto a mis jugadores en no perder nunca de vista el objetivo final: ascender en mayo o junio. Por este motivo, nos vamos poniendo objetivos parciales: crecer como equipo porque somos casi todos nuevos, dar minutos a muchos jugadores para que se sientan partícipes del proyecto, alcanzar 15 puntos, alcanzar los 27... El siguiente es llegar a los 40 puntos. Me gustaría lograrlo antes de terminar la primera vuelta», asevera.
Muy cerca de los récords
Sea en la división que sea, ganar nueve partidos seguidos no es sencillo. Hacerlo al inicio de la competición, sin rodaje, aún menos. Por ejemplo, la mejor racha de victorias consecutivas en un comienzo de Primera División la tiene el Real Madrid, en la temporada 1968/69, con nueve, las mismas que actualmente suma el Alcoyano. Hace unos días, mientras los de Parras mantenían su pleno, el Liverpool perdía el suyo en la Premier League. No pudo conseguir la novena.
El actual Alcoyano ya está en los libros de historia del fútbol alicantino con una racha que forma parte de las mejores de los clubes de la provincia. Los próximos partidos serán clave para saber si llega a lo más alto de la cima.
Este fin de semana, los hombres de Vicente Parras podrían igualar la mejor racha de triunfos consecutivos de la historia del club. El Alcoyano ganó 10 partidos seguidos entre las jornadas 23 y 32 de la 1956/57, en Tercera. Si doblegan al Hércules B caerá otro récord. Por detrás ya han quedado otras plantillas históricas que maravillaron en El Collao como la de la 1949/50, que ganó ocho duelos seguidos en Segunda o la de la 1978/79, que se quedó en siete, con la presencia en el último de ellos en el palco del estadio de todo un ilustre: Luis Aragonés, técnico del Atlético de Madrid.
Más allá de este récord de club aparecería la gran cifra histórica del fútbol alicantino hasta la fecha: 11 victorias seguidas. Es el tope de un equipo de la provincia, tanto en un inicio de Liga como en cualquier momento de la competición. En ambos casos el récord es del Elche, que ganó los 11 primeros partidos de la temporada 1943/44 y todos los comprendidos entre las jornadas 22 y 32 en la 1956/57. Curiosamente, ninguno de esos dos años logró ascender. Más reciente y con premio final estaría el ejemplo del Orihuela, que el curso pasado llegó a encadenar una decena de triunfos.
Entre el resto de históricos clubes de la provincia destacarían las ocho victorias seguidas del Hércules (1934/35, en Segunda), Orihuela Deportiva (1988/89), Eldense (1991/92 y 2003/04) y Novelda (2006/07 y 2010/11), todas ellas ya superadas por el Alcoyano o notables inicios sin perder en Tercera División de otros clubes como Villajoyosa, Denia, Jávea o La Nucía.
Tras componer y estrenar con éxito su novena sinfonía, el genio Beethoven ya no completaría ninguna más. Cayó enfermo y falleció tres años después (1827). Tras sus nueve victorias, el Alcoyano de Vicente Parras espera que le queden muchas más, para batir récords y, sobre todo, para celebrar un ascenso al «himno de la alegría».
