La Nucía continúa sin despertar de su idílico sueño y, tras su victoria ayer en Lleida (0-2), se ha convertido en el sorprendente líder del grupo III de Segunda División B después de las dos primeras jornadas de Liga. Además, el conjunto que entrena César Ferrando es el único que ha logrado un pleno de puntos tras los dos primeros partidos. Algo inimaginable para un equipo que debuta esta temporada en la categoría de bronce del fútbol español y que está haciendo historia.
El cuadro nuciero asaltó el feudo del cuadro catalán con dos zarpazos en los primeros 14 minutos del encuentro frente a un rival que está llamado a estar en la parte alta de la clasificación.
Los rojillos no se amedrentaron ni por el escenario, ni por el potencial del Lleida y salieron a morder desde el pitido inicial. Esa apuesta valiente de César Ferrando sorprendió a los locales. A los 9 minutos, después de un saque esquina se produjo un despeje de la defensa catalana, el balón llegó a la frontal del área y Fran Moreno, que está en plena racha goleadora, enganchó un cabezazo que mandó el balón al fondo de la mallas de la portería de su exequipo.
El tempranero gol sentó fatal a al Lleida que quedó descolado. Más aún cuando cinco minutos después, en el 14, Morgado aumentaba la renta y tras un remate batió por segunda vez la portería de Pau Torres. Ver para creer. Delicioso marcador para La Nucía en el primer cuarto de hora del partido en el que los locales apenas inquietaron a Óscar Fornés. Tan solo un disparo de Eder puso en algún aprieto la portería rojilla.
Durante el primer tiempo, los nucieros controlaron y manejaron muy bien el juego según les interesaba, estando ordenados en defensa y cerrando los espacios, lo que ahogó al Lleida.
Con el resultado de 0-2, a los catalanes no les quedaba más remedió que salir en tromba en el segundo tiempo y buscar el área visitante. Liberto Beltrán estuvo a punto de aminorar distancias con un lanzamiento con su pierna izquierda que salió rozando el poste de la portería Óscar Fornés.
Los minutos fueron corriendo a favor de La Nucía que manejaba los tiempos del partido y metía la presión a un conjunto catalán atascado y sin ideas, que apenas volvería a visitar el área nuciera más allá de un golpeo lateral que salvó Fornés.
Los últimos minutos fueron perfectamente gestionados por los rojillos, que fueron durmiendo el encuentro hasta llegar al final con una victoria. Seis puntos de seis para los pupilos de César Ferrando, que ni en sus mejores sueños se hubieran imaginado este gran comienzo de campeonato.
