Entorno singular, inédito, impactante... a la altura del evento. Las Salinas de Torrevieja se abren al mundo a través del ciclismo. La Vuelta a España sale hoy a la carretera. Lo hace con neto sello alicantino, exhibiendo sus virtudes, su policromía, su músculo. La 74ª edición de la carrera en bici más importante del país ha elegido un espacio protegido para su puesta de largo en un universo, el actual, en el que la imagen lo es casi todo. Todo está preparado, el primer maillot rojo de la ronda nacional se dará esta tarde un hermoso baño de sal.
La baja del ecuatoriano Richard Carapaz ha privado a la última gran vuelta de la temporada de su principal favorito, pero su equipo, el Movistar, acepta con Nairo Quintana y Alejandro Valverde el reto de pelear por la general ante rivales que encabezan las lista de ganadores más probables en las casas de apuestas: el esloveno Primoz Roglic (del Jumbo Visma) y el colombiano Miguel Ángel «Supermán» López (Astana). 21 etapas, las tres primeras sobre suelo alicantino, marcarán el destino de La Vuelta más abierta de la última década.
La caída de Carapaz el pasado domingo en un criterium al que acudió de forma voluntaria, las bajas voluntarias de los británicos Froome y Simon Yates (el último ganador), y las ausencias de Egan Bernal o Tom Dumoulin no le resta ni un ápice de interés a un recorrido espectacular con 8 finales en alto y una crono larga en Pau (Francia) que serán determinantes en la selección de los integrantes del podio final el 15 de septiembre, en Madrid.
La nómina de aspirantes a heredar la corona roja la encabeza Roglic. Tercero en el último Giro, el exsaltador de esquí, de 19 años, busca su primera «grande». Recuperado del esfuerzo del trazado italiano y avalado por un equipo mayúsculo (que incluye a Steven Kruijswijk, tercero en el Tour), la candidatura de Roglic al maillot rojo es la más potente.
Movistar y Astana serán los bloques que traten de contrarrestar el poder del Jumbo. Ambas escuadras disponen de argumento suficientes. Sin Carapaz no habrá debate de líderes en Movistar. Quintana, en el año de su despedida del equipo, tendrá lo que siempre buscó: los galones indiscutibles. Los lucirá el boyacense, quien tendrá como gregario de lujo a un verso libre llamado Alejandro Valverde, vigente campeón del Mundo.
Supermán López, ganador del Tour de Colombia y la Volta a Cataluña, se quiere consagrar en una ronda de tres semanas. Ya conoció el tercer escalón del podio en el Giro y la Vuelta en 2018, pero ahora apunta al número uno. Como Roglic, también tiene una escuadra fuerte, con el danés Jakob Fuglsang y los españoles Gorka e Ion Izagirre y Omar Fraile. El abanico de favoritos se amplia a un segundo escalón en los que caben nombres como el holandés Wout Poels (al mando del Ineos) el colombiano Rigoberto Urán (EF) y su compatriota Esteban Chaves (Mitchelton), aunque dos no cotizan en las apuestas como los anteriores.
El ciclismo español pondrá el liza tres equipos más, el Euskadi Murias, de Óscar Rodríguez, el Caja Rural RGA (con mucha presencia en la Vega Baja) y el Burgos, en principio llamados a luchar en cada metro de asfalto por ser protagonistas en cada etapa y tratar de cazar algún éxito parcial.
A la sombra de los favoritos será muy atrayente ver la progresión de corredores como Marc Soler (Movistar), magnífico en su misión gregaria en el pasado Tour; de David de la Cruz, incluido a última hora en el Ineos; y de otras promesas con un enorme futuro como Fernando Barceló (del Euskadi Murias).
La salida de la crono inicial por equipos se tomará desde una montaña de sal junto al lago rosa de Torrevieja. Serán 13 kilómetros de recorrido, suficientes para conocer al primer maillot rojo y marcar las primeras distancias si alguien se despista o comete un error en un trazado muy rápido. Las otras dos etapas en la provincia son las que unirán mañana Benidorm y Calpe (193 kilómetros) y, el lunes, Ibi con Alicante después de 186 kilómetros bajo el sol. El martes, la prueba partirá de Cullera, es decir, que una buena parte de la caravana ciclista no hará noche en la capital.
Hora de salida: 18.56
Con la rampa de salida junto a las montañas de sal de Torrevieja, los veintidós equipos participantes iniciarán la carrera cuatro minutos antes de las siete de la tarde. Completarán una crono corta, de 13,3 kilómetros, sobre un circuito urbano entre las Salinas de Torrevieja y centro urbano de la localidad completamente llano en el que, sobre el papel, no se han incluido zonas complicadas.
La primera parte del recorrido se desarrollará por el interior de la población, mientras que, poco después de superar el ecuador, se girará para empezar a rodar en paralelo al mar hasta cruzar la línea de meta.
El primer equipo que tomará la salida y, por ende, inaugurará esta septuagésima cuarta edición, la décima con el color rojo como principal distintivo, será el Dimension Data. Tras él, cada cuatro minutos, irán arrancando el resto de formaciones hasta llegar al Movistar, que, debido a la ausencia del vencedor de la pasada edición, el británico Simon Yates, será el encargado de cerrar esta primera jornada de competición, dado que la organización ha asignado el dorsal número uno a Alejandro Valverde como reconocimiento a su corona mundial. En principio, la organización estima que antes de las 20.30 eche el telón la primera etapa la calle Duque de Levante, en la Marina Sala.
Nairo Quintana se sacude el peso de favorito en la víspera del su estreno: «El favorito es Roglic, es un corredor completo, superior en la contrarreloj, pero con el equipo que tenemos a ver cómo lo podemos parar. La crono es larga, pero hay que defenderse», comentó el colombiano en su hotel de concentración en Torrevieja. «Si no estuviese preparado, no habría venido», confesó el líder del Movistar, que se irá del equipo al final de La Vuelta.
Valverde, el tapado, tiene clara su hoja de ruta. «Yo intentaré no perder tiempo en la general e iremos valorando la marcha de La Vuelta día a día», reveló el ciclista murciano, que no tienen problema a la hora de aceptar que su compañero Nairo «es nuestro líder». Otro colombiano, Miguel Ángel López (Astana Pro Team), detalló que su objetivo es hacerlo «un poquito mejor que en la anterior competición y crecer». Mientras tanto, Esteban Chaves comentó que en su equipo, el Mitchelton-Scott, «no hay objetivos individuales sino uno colectivo: buscar victorias de etapa». La Vuelta empieza hoy, salgan de casa a recibirla.
Un pelotón multicultural con 30 nacionalidades
Los 36 ciclistas con pasaporte español son mayoría entre los 176 inscritos, seguidos de los franceses (17) y los italianos (13)
La Vuelta 2019 vuelve a hablar mayoritariamente en español, al igual que lo han hecho ya este año el Tour de Francia y el Giro de Italia, en este último caso el de Latinoamérica, pero entre los 176 componentes que tomarán la salida esta tarde en las Salinas de Torrevieja habrá ciclistas de hasta 30 nacionalidades diferentes.
En este políglota pelotón, en el que históricamente siempre se han entendido sus diferentes componentes en una mezcla errática de idiomas para chapurrear unos y otros, justo la mitad se encuadran en solo cinco países y el resto lo hacen en los otros veinticinco.
España cuenta con 36 representantes encuadrados en hasta nueve formaciones de las veintidós que tomarán la salida, aunque ninguna de ellas estará compuesta en exclusiva por ciclistas nacionales. De hecho no habrá equipo alguno con una única nacionalidad en carrera, tan solo el vasco Euskadi-Murias con siete ciclistas nacionales y un francés, el AG2R La Mondiale, con siete franceses y un suizo. Son los dos conjuntos más monocromáticos en cuanto a nacionalidades.
A los ciclistas españoles les siguen en número los franceses, con 17, y los italianos con 13, que junto con Colombia y Bélgica, con once representantes cada uno, son los cinco únicos países que superan la decena de participantes. En los países menos numerosos, ocho contarán con un único abanderado. Son los casos de Ucrania, Japón, Argentina, República Checa, Suecia, Bielorrusia, Eritrea y Etiopía.
